Parece que hay fábricas de encuestas. Los resultados de unas y otras se publican como si los trabajos de campo y otros requisitos técnicos se realizaran en una factoría o una zona franca, con la presión del tiempo y de la coyuntura política.
Parece que cada bando político quiere contrarrestar el impacto del contrario cuando se ofrecen detalles de las simpatías “momentáneas” del electorado.
Y el morbo se acrecienta cuando las firmas encuestadoras dan a determinado precandidato por encima de su adversario de partido, o cuando los resultados se proyectan para los comicios de 2020. Existe un bombardeo sistemático de resultados de encuestas que solo sirven para el circo mediático de las primarias del 6 de octubre. Entre muchos expertos se estima que se juega a la percepción para llamar la atención sobre un aspirante, sin importar la realidad del electorado.
Y otros, sin embargo, se preguntan dónde está la Junta Central Electoral, ya que no se cumple con la ley, en virtud de que no se ofrecen datos de quién o quiénes financian esas investigaciones y otros pormenores técnicos.
Solo se ofrecen los números sobre los precandidatos de los partidos Revolucionario Moderno y de la Liberación Dominicana, lo que ha servido para crear malestar en esas parcelas.
Las protestas…
Cada día se incrementa el malestar en la ciudadanía por causa de los apagones y del deterioro de las vías públicas. En la provincia El Seibo se desarrolla una huelga iniciada hace dos días por reclamos sociales, y lo mismo ocurre en otros lugares del país.
