La mujer enfrenta más preocupaciones y tensiones que los hombres, por lo que requiere de un mayor monitoreo.
SANTO DOMINGO.-En décadas anteriores la enfermedad cardiovascular y los infartos eran considerados propios de los hombres.
Sin embargo, las estadísticas en las últimas décadas refieren que las enfermedades del corazón son la principal causa de muerte en la mujer dominicana y en el mundo.
Una de cada tres morirá de alguna afección cardiovascular, mientras que una de cada ocho será de cáncer, advierte el gremio de los cardiólogos al conmemorarse febrero como Mes del Corazón.
Su presidenta, Claudia Almonte, refiere que la mujer dominicana, como la mayoría en América Latina y el mundo, le resta significado al cuidado cardiovascular y el corazón.
Hace mención que por la tardanza en las evaluaciones los especialistas le diagnostican afecciones cardíacas cuando “es tarde”.
En ese sentido, Almonte abordó la necesidad de conocer desde los 20 años la situación clínica cardiovascular de la población femenina.
De esta manera, apunta, la mujer podrá conocer “a tiempo” su condición cardiovascular y médico y paciente sabrán cómo tratar en caso de una patología.
Recuperación compleja
Alega que cuando una mujer padece un infarto o trombosis el incidente es más grave, la recuperación es más compleja y tendrá siempre mayor riesgo de repetir el incidente que el hombre.
Almonte, quien es parte del equipo médico del Centro de Medicina Cardiovascular (MCA), señala que la hipertensión, diabetes, obesidad o un infarto son mucho más letales en ellas que en el sexo masculino.
Explica que después de la menopausia la mujer tiene un mayor riesgo de sufrir un ataque al corazón, sobre todo aquellas que tienen condición de algún antecedente cardíaco hereditario, colesterol alto, fumadoras, hipertensas, diabéticas, obesas o en sobrepeso.
Igual aquellas con tratamientos de quimioterapias o radioterapias y las que han tenido preclancia, entre otros factores peligrosos.
La experta dice que aunque la disminución de estrógeno en la mujer pudiera iniciar a partir de los 50 años, época donde se presenta la menopausia regularmente.
Agrega que pudiera también presentarse antes de esta edad, considerándose una menopausia precoz.
El primer estudio
De acuerdo a Almonte, toda mujer -pasados los 20 años- debe realizarse su primer estudio cardiovascular y mantener ese ritmo evaluativo “cada año”.
La galena asegura que no es frecuente ver a una mujer realizarse evaluaciones cardiovasculares, como lo hace con el papanicolau o mamografía.
Cree preocupante que la mujer no le preste igual atención a un estudio cardiovascular como lo hace “puntualmente” con otros exámenes médicos, pues ella se enfrenta a condiciones de riesgo exclusivas.
— Factores de riesgo
La ingesta de anticonceptivos y estrés emocional provocados por las hormonas y por situaciones externas producen alteración de los nervios o depresión, además del estrés del hogar y el trabajo.