La influenza es una infección viral que puede causar fiebre, tos, dolor de cuerpo, y otros síntomas. La forma más común de influenza es la estacional.
Hay diferentes formas de influenza estacional, por ejemplo, está la del tipo A y la del tipo B.
Anahi Goicochea, médico internista de los Centros de Diagnóstico y Medicina Avanzada y de Conferencias Médicas y Telemedicina (Cedimat), explica que la mayoría de las personas que contraen el virus mejoran a los pocos días.
Sin embargo, hay un grupo que debe hospitalizarse debido a la influenza y hay otro grupo que hasta puede fallecer debido a esta afección, ya que puede llegar a ocasionar neumonía viral y otras complicaciones como neumonía bacteriana o mixta.
Cita, además, que la influenza puede ocasionar Síndrome de Distres Respiratorio Agudo (SDRA), falla multiorgánica, complicaciones cardiacas como infarto agudo al miocardio, miocarditis y pericarditis, complicaciones neurológicas como encefalitis, mielitis transversa, meningitis y Síndrome de Guillain-Barré; entre otras.
La especialista detalla que la población de mayor riesgo es la de personas mayores de 64 años, mujeres embarazadas o postparto (hasta dos semanas después del parto) y residentes de asilos.
También incluye aquellas personas con enfermedades de base como insuficiencia renal crónica, enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), condiciones que causen inmunocompromiso, enfermedades cardiovasculares, diabetes tipo 2 y obesidad.
Sobre los síntomas, la doctora especifica que todos los tipos de influenza pueden causar fiebre (temperatura corporal >37.8°C), debilidad generalizada y cansancio, dolor de cabeza y cuerpo, tos, dolor de garganta y congestión nasal, entre otros.
“En caso de que presente síntomas sugestivos de influenza, lo ideal es que acuda a una consulta y su médico determine cuál es el mejor método diagnóstico para usted. Esta puede diagnosticarse a través de estudios de laboratorio, a través de pruebas rápidas, moleculares.
Función de las vacunas
Goicochea afirma que la vacuna puede prevenir que se contagie de esta enfermedad viral. Además, ayuda a proteger de enfermarse a las personas que conviven o trabajan con nosotros.
Sostiene que en caso de que a pesar de haberse vacunado se contagie de influenza, usualmente la enfermedad tiende a ser menos severa y se evitan complicaciones.
Detalla que la vacuna se produce anualmente y algunos años es más efectiva que otros, debido a que el virus muta constantemente y no se puede predecir cuál será su comportamiento.
“Hay personas que piensan que la vacuna no funciona porque a pesar de haberse vacunado desarrollan procesos gripales, pero esto no significa que la vacuna no sea efectiva. Es probable que el virus que cause el proceso gripal no sea el de la influenza estacional”, precisa.
La médico especifica que hay dos vías de administración de la vacuna: mediante inyección intramuscular o un spray nasal. Dice que hay tres tipos de vacuna, una de virus inactivado, otra de virus vivo atenuado y una recombinada.
Cada una tiene indicaciones y una población en específico a quien debe administrarse.
Sobre uno de los tabúes más frecuentes con relación a esta vacuna, la doctora dice que hay muchas personas que creen que esta vacuna causa infección por influenza, lo cual no es cierto. Explica que lo que si puede ocurrir es que se hayan contagiado de influenza u otro virus antes o inmediatamente después de vacunarse.
El efecto de la vacuna no es inmediato, tarda dos semanas en crear defensas. Al ser cuestionada sobre quiénes deben vacunarse, la especialista detalla que todos, desde los seis meses de edad.
“Aunque debemos insistir más con los grupos de alto riesgo que corresponden a los que mencionamos previamente, además de personas que estén recibiendo quimioterapia, y el personal de salud”.
El mejor momento
Goicochea destaca que el mejor momento para vacunarse es antes de que inicie el invierno. En el país usualmente la vacuna llega en el mes de octubre, por lo que lo ideal es vacunarse apenas esta esté disponible.
También dice que la vacuna de la influenza puede administrarse en conjunto con otras vacunas, lo único que deben tomar en cuenta es que no se administren en la misma área.
“Contrario a lo que muchos piensan, los adultos también debemos cumplir con un esquema de vacunación, sobre todo aquellos que pertenecen a los grupos de alto riesgo”, concluye Goicochea.
Vacunarse este año
— ¿Durante la Covid?
Este año, más que nunca, es importante vacunarse contra la influenza. Los síntomas son muy similares a los del COVID-19. Para diferenciar su origen se debe recurrir a pruebas diagnósticas de laboratorio.
Cuáles son los efectos adversos
La vacuna puede tener efectos como enrojecimiento o hinchazón del área donde fue aplicada, fiebre, dolor de cabeza o de cuerpo.
También puede haber reacciones alérgicas, sobre todo en personas que han presentado reacciones alérgicas severas (anafilaxis) al huevo o han presentado reacciones a la vacuna de la influenza previamente, por lo que este grupo de personas, en caso de vacunarse, deben realizarlo bajo estricta observación médica.
En los pacientes que desarrollaron Síndrome de Guillain-Barré, hasta seis semanas posterior a la administración de la vacuna, también se puede revalorar su indicación.