SANTO DOMINGO.-Por su resistencia a la salinidad, la capacidad de fijar el suelo y evitar la erosión, la uva de playa como se le conoce en el lenguaje popular es asociada y tiene una mayor presencia en las áreas costeras.

Sin embargo, este árbol que lleva por nombre científico (Coccoloba uvifera L.) y pertencece a la familia: Polygonaceae en la normativa “Lineamientos y técnicas de manejo del arbolado”, específica que está permitido en parques, plazas, avenidas, calles residenciales y litoral.

Las hojas se asemejan a un corazón.

De ahí que su uso o plantación es recomendado para el arbolado urbano de Santo Domingo por el embellecimiento, su valor ornamental y se destaca la multifuncionalidad del arbolado urbano en distintos espacios, ya que proporciona servicios ecosistémicos relacionados con mejoras ambientales y sociales.

Lugar de origen
“Es un árbol nativo de América Tropical, es decir que está adaptado aquí y en otras ciudades de la región; crece mayormente en el bosque costero, desde el nivel del mar hasta los 300 metros de altitud y de acuerdo a la fenología o factores biológicos que incide en él, florece entre abril y junio y fructifica de julio a septiembre”, de acuerdo con Teodoro Clase, encargado de Botánica del Jardín Botánico Nacional, Doctor Rafael María Moscoso.

Características
Se trata de un árbol leñoso de hasta 15 metros de altura, con un ancho de copa de 10 metros, tiene hojas grandes, redondeadas y coriáceas, de color verde oscuro por el haz o cara superior y más claras por el envés, es decir en la parte debajo.

Frutos comestibles
Sus frutos numerosos en racimos, rojizos o morados cuando están maduros, y es una especie dioica, que genera flor macho y la hembra crece en diferentes plantas.

Son comestibles, usados en refrescos y helados; sirven de alimento a las aves, además utilizados en la medicina tradicional para tratar la diarrea, disentería, escorbuto y heridas, según el experto Teodoro Clase.

Sus frutos crecen en forma de racimos.

Previo al uso medicinal de plantas es importante consultar la “Farmacopea Caribeña”, que habla del uso científico, sí son medicinales y sí esta comprobado su efecto.

Paisajismo

— Proliferación
En los últimos tiempos el árbol es plantado en isletas, jardinerías y parques urbanos. En las áreas costeras mitigan los embates de los fuertes de los vientos ante la ocurrencia de fenómenos naturales.