Santo Domingo.-Natalia Pérez, de 75 años lleva cuatro décadas residiendo en el barrio Los Guandules y cuenta que a pesar de que plagas aquejan siempre ese sector, la chincha (chinche de camas) se ha asentado de forma casi permanente en el vecindario.

Esto obliga a los residentes a botar objetos infestados por estos insectos, lo que también ha provocado una tensión permanente en la comunidad.

“Ya no se puede más, tuve que botar mi colchón, lo tiré por ahí, porque así no se puede”, expresa Pérez, mientras alza las manos.

Residentes del barrio de los Guandules

Manifiesta que el clamor no ha sido escuchado ni por la junta de vecinos, ni tampoco por las autoridades del Ministerio de Salud Pública.

Mientras Natalia narra la situación que vive día a día en ese entorno, Pedro Toribio, de 70 años, asiente. Su rostro evidencia desesperanza. Al igual que Pérez, desde muy joven ha vivido en Los Guandules y considera que no han sido tomados en cuenta al momento de acabar de forma rápida con la propagación de estos insectos casa por casa.

“Aquí no ha venido nadie… la gente no entra por estos lados, ningún tipo de programa de fumigación tampoco”, puntualiza.

En tanto, Ivelia Jiménez concuerda con todos, se une al grupo y afirma que están: “desamparados”.

Guillermo Ulloa es otro de los que se aqueja de la situación que cataloga como preocupante, ya que teme que esta plaga continúe afectando a las personas, en especial a los niños, quienes generalmente sufren de constante comezón por esta plaga.

Mildred Sánchez, de 42 años y vendedora de fritura en el referido sector, indicó que algunos muebles tuvo que botarlos porque se dio cuenta de la gran cantidad de chinchas y notó la presencia de estas debido a un recurrente picor que sentía cada vez que se sentaba en uno de ellos.

Reacción de Salud Pública

Natalia Pérez.

El Centro de Prevención y Control de Enfermedades Transmitidas por Vectores y Zoonosis (Cecovez), del Ministerio de Salud Pública, indicó que procederá a fumigar el lugar, y evaluar las condiciones del barrio a fin de ir reduciendo gradualmente la población de estos insectos.

Aunque las autoridades de este centro no precisaron el día exacto en el que acudirán, lo cierto es que prometen llevar a cabo un programa completo para inspeccionar cada vivienda del lugar, mediante un sistema de monitoreo, para comprobar de qué manera deberán intervenir las zonas señaladas por los habitantes donde se concentra mayor cantidad del insecto, en este caso de la chincha.

El director de Cecovez, Manuel Tejada, afirmó que también comprobarán el estado de otros barrios, como Los Tres Brazos, para descartar algún otro vector en otras zonas.

Chinchas
Las chinchas son unos pequeños insectos que pican el cuerpo de las personas y animales de sangre caliente y pueden ocasionar lesiones en la piel.

El lugar predilecto para “esconderse” son colchones, estructura de la cama o cabeceras, en la costura de muebles tapizados, debajo de los interruptores de luz o de las tomas eléctricas y se pueden desplazar en artículos de ropa, equipaje, muebles, cajas o cubrecolchones.

Reacción

— Síntomas
Las chinchas pueden ocasionar manchas rojas en la piel de un ser humano, pueden provocar mucho ardor y picazón, así como también ampollas graves en caso de complicación.