El Premio Nacional de Periodismo que se le otorga a Osvaldo Santana tiene una historia. La entrega tiene una trayectoria vertical, ya que cada año recae en profesionales de la prensa con una labor aquilatada por varias décadas de ejercicio.
Esta vez, al recibirlo Osvaldo Santana, hay que ver su hoja de servicio. En la actualidad, director de “El Caribe”. En el pasado reciente dirigió el “Listín Diario” y los desaparecidos periódicos “El Siglo” y “Última Hora”.
En todos esos espacios laborales dejó la impronta del deber cumplido, siempre firme en su indeclinable compromiso con la libertad de prensa y la defensa de los mejores intereses de la sociedad.
El Ministerio de Educación y el Colegio Dominicano de Periodistas, con la entrega del Premio Nacional de Periodismo, abre una ventana en el pasado y los inicios de Santana en su dilatada carrera, y podemos ver, a través de esa abertura el ascenso, paso a paso, del profesional.
Trayectoria que sin duda se aquilató hasta hoy en medios de comunicación como “El Nuevo Diario” y la revista Rumbo, que en su momento también constituyeron verdaderas escuelas éticas en el ejercicio del periodismo dominicano.
Una vez más el premio conecta con la historia contemporánea que vive la libertad de prensa y el derecho a la información de una sociedad tan demandante como la dominicana.
Se entrega en una era matizada por importantes cambios y el imperio de la globalización de la información. El premio es merecido y la escogencia se hizo con toda justicia y transparencia. Felicidades Osvaldo Santana.