Casi como si de un equipo de fútbol histórico se tratase, Apple también cuenta con nombres ilustres -casi de leyenda-; fácilmente reconocibles para aquellos que sienten especial interés por la tecnología.
Sin duda, Steve Jobs, su cofundador y desaparecido director ejecutivo, estaría en la cumbre, y a este le seguirían el también padre del gigante Steve Wozniak, el actual mandamás, Tim Cook, o el que fuera diseñador estrella durante tres décadas: Jony Ive quien, después de haber pasado a trabajar de forma externa para la empresa en 2019, ha roto su relación profesional con la firma definitivamente.
Ive llevaba los últimos tres años ocupándose de dirigir su propia empresa de diseño, LoveFrom. Cuando salió de la firma de la manzana, lo hizo con un contrato debajo del brazo superior a los 100 millones de dólares, por el que se comprometía a continuar ayudando a dar forma a los dispositivos que Apple ha ido lanzando al mercado.
La finalización del acuerdo de colaboración se habría producido por la finalización del acuerdo y la decisión de Apple de no prorrogarlo.
Según han afirmado personas cercanas al asunto, todo estaba listo para que Ive plantase la firma en un nuevo contrato; sin embargo, algunos ejecutivos de la empresa habrían estado poco conformes con los costes de mantener en nómina al diseñador. Tampoco habría gustado que Ive hubiese reclutado a varios trabajadores de la manzana.