Marlin Martínez fue apresada y enviada a cárcel por complicidad.
Santo Domingo.- El Primer Juzgado de Instrucción de San Francisco de Macorís ratificó la medida de coerción de tres meses de prisión preventiva impuesta a Marlin Martínez, implicada en el asesinato de la joven Emely Peguero, quien fue ultimada en agosto de este año.
El tribunal explicó que ratificó la medida por tres meses más con fecha de vencimiento el día 28 de febrero de 2018 y que la defensa no presentó los elementos de prueba de arraigo.
La mujer junto a su hijo Marlon Martínez son los principales acusados de la muerte de la joven, quien al momento de su fallecimiento estaba embarazada.
Según relata el acta acusatoria del Ministerio Público, Marlon Martínez pasó a recoger a Emely Peguero por la casa de los padres de esta bajo el pretexto de ir a retirar los resultados de los análisis realizados anteriormente en el Centro Médico Nacional, de San Francisco de Macorís.
Sin embargo, no la llevó al centro de salud, sino al apartamento de su madre, Marlin Martínez, en la misma ciudad, donde la habría sometido a maltratos físicos, sicológicos y actos de tortura y barbarie, lo que conllevó la posterior muerte de la adolescente, indica la acusación del Ministerio Público.
“Todo esto por la negativa de la misma (Emely Peguero) de someterse a un aborto”, puntualiza la descripción del caso en la solicitud de medida de coerción por el Ministerio Público contra el imputado.
Las autoridades acusan a Marlon Martínez de homicidio agravado y/o asesinato, mientras que su madre Marlin Martínez es acusada de cómplice de homicidio agravado y/o asesinato contra la adolescente Emely Peguero.
El documento, del cual EL DÍA obtuvo una copia, indica que Emely tenía un noviazgo consentido con Marlon Martínez desde hacía más de dos años y que producto de dicha relación quedó embarazada hacía 22 semanas.
Agrega que en horas de la mañana del 19 de agosto pasado, Marlon Martínez procuró en la casa materna a Emely para practicarle una prueba de embarazo que resultó positiva y entonces le planteó la posibilidad de abortar, a lo que la joven se opuso porque había decidido tener a su hijo.
El lunes 21 y martes 22 de agosto Emely acudió al Centro Médico Nacional junto a su madre, Adalgisa Polanco, para realizar los chequeos y análisis rutinarios de su embarazo, los cuales dieron como resultado que el mismo se desarrollaba con normalidad.
