- Publicidad -

- Publicidad -

Tres trampas frenan el desarrollo en América Latina, advierte la CEPAL

  • El organismo propone una transformación productiva verde e inclusiva, con integración regional y políticas ambiciosas para evitar una nueva década perdida

Santo Domingo.- La mayoría de los países de América Latina y el Caribe se encuentran atrapados en tres trampas estructurales que limitan seriamente la mejora del bienestar de su población.

Según revela un reciente estudio de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), se trata de una baja capacidad para crecer, una alta desigualdad con escasa movilidad social y cohesión, y débiles capacidades institucionales acompañadas de una gobernanza poco efectiva.

A estos desafíos se suma el impacto del cambio climático y la urgencia de avanzar hacia un modelo de desarrollo ambientalmente sostenible.

Para salir de estas trampas, la Cepal plantea redoblar los esfuerzos para promover una transformación productiva de las economías, que permita dinamizar la productividad y alcanzar un crecimiento más elevado, sostenido, inclusivo y sostenible.

Te puede interesar leer: Pobreza en baja, ayudas sociales en alza: el otro lado de las estadísticas oficiales

“Esta transformación definida como un proceso de sofisticación, diversificación y cambio estructural positivo no sucederá espontáneamente ni por obra de una “mano invisible”, aclara el documento.

Para esto, aclara que se necesita de políticas públicas deliberadas, coordinadas con todos los actores clave y de largo plazo. Dicha visión estratégica de la acción colectiva define la nueva generación de políticas de desarrollo productivo necesarias para la región.

Señala que el planteamiento cobra más urgencia en el contexto internacional actual, marcado por tres grandes fuerzas como las misiones geopolíticas y rivalidad tecnológica, la emergencia climática y la revolución tecnológica.

Ante este panorama, el organismo advierte que no actuar implica desaprovechar la oportunidad de construir sobre activos estratégicos y ventajas comparativas, convirtiendo el nuevo contexto global en una nueva fuente de vulnerabilidad.

De esta manera, sostiene que la región podría así encaminarse hacia una tercera década perdida.

Una oportunidad verde e inclusiva basada en la integración regional

A nivel regional, los países de América Latina y el Caribe tienen una oportunidad única para avanzar hacia un desarrollo productivo verde e inclusivo mediante el fortalecimiento de la integración y la cooperación regional, a través de políticas más coordinadas.

Según el estudio de la CEPAL, un mercado regional ampliado puede viabilizar sectores que dependen de complementariedades y escala mínima para ser económicamente sostenibles.

Apunta que los requisitos de contenido regional, como complemento de los requisitos nacionales, podrían actuar como catalizadores de esta integración productiva, especialmente en cadenas de valor verdes.

Estas cadenas encuentran complementariedades clave en la región ya que algunos países poseen reservas estratégicas de minerales, mientras otros tienen capacidades industriales para producir, por ejemplo, vehículos eléctricos.

Añade que avanzar en normativas y especificaciones técnicas comunes, como en el caso de los autobuses eléctricos, será esencial para fortalecer esta integración.

Además, un mayor grado de integración podría atraer inversiones extranjeras al reducir la incertidumbre, mientras que taxonomías comunes para inversiones verdes o sostenibles facilitarían la canalización de recursos hacia iniciativas climáticas.

Resalta que en un contexto global donde los países buscan diversificar fuentes de energía y reducir la dependencia de los combustibles fósiles, América Latina y el Caribe se posiciona estratégicamente para liderar inversiones en energías limpias.

Agrega que la integración energética regional también podría disminuir los costos de la transición y mitigar los riesgos de intermitencia asociados a fuentes renovables no convencionales.

Gobernanza, capacidades y liderazgo para la transformación

Además, el informe subraya que el fortalecimiento de capacidades técnicas y operativas (TOPP) será clave para gestionar estas transformaciones.

Plantea que herramientas modernas de gestión pública, como las usadas por el Sistema Nacional de Cambio Climático (SISCLIMA) en Colombia, pueden contribuir al seguimiento y evaluación de políticas vinculadas a la transición energética.

Asimismo, señala que mejorar las capacidades prospectivas es fundamental para anticipar escenarios climáticos, gestionar riesgos y aprovechar nuevas oportunidades.

Pero también será necesario reforzar las coaliciones políticas y las capacidades de liderazgo para impulsar esta agenda transformadora.

En ese sentido, enfatiza que el próximo 30° período de sesiones de la COP en Brasil representa una gran oportunidad para que la región exprese una voz común sobre estrategias de desarrollo productivo verde y financiamiento climático, elementos clave de las estrategias industriales sostenibles.

El sello verde de América Latina

Este momento ofrece una ventana de oportunidad histórica para que América Latina y el Caribe dé un gran impulso a las inversiones transformadoras, orientadas a un futuro más productivo, inclusivo y sostenible.

Según el estudio de la CEPAL, al priorizar el desarrollo productivo verde e inclusivo, la región puede posicionarse como un referente global en soluciones sostenibles, aprovechando su biodiversidad, recursos hídricos, potencial en energías renovables, producción de alimentos y turismo ecológico.

“Los bienes y servicios latinoamericanos podrían llevar un sello internacional de sostenibilidad, apoyado en una matriz energética limpia, trazabilidad y cumplimiento ambiental. Si bien los desafíos son significativos, los beneficios de esta transformación superan con creces los costos”, explicó.

Etiquetas

Eymi Silvestre

Periodista del área económica.

Artículos Relacionados