Rubén Sosa durante el triunfo de los Toros que complicó a los Tigres. fuente externa
SANTO DOMINGO.-La serie semifinal llegó a su última fecha con múltiples posibilidades abiertas para tres equipos que buscan ser el segundo finalista, junto a los Toros del Este. Pero ha sido este equipo de los Toros, el hueso duro de roer en la etapa final de la serie jugada en el formato round robin.
La filosofía de Lino Rivera es jugar duro, aunque con la administración de personal que requiere la situación. “Respetamos el juego y a los equipos que están en pelea. Sí he aprovechado para dar juego al personal que ha visto menos acción, algunos de ellos aún sin contrato para el verano”, apuntó el nativo de Puerto Rico, tras el triunfo de los Toros sobre los Tigres del Licey 7-3, el martes.
La derrota azul dejó abierto el abanico de posibilidades para unos Leones del Escogido que resurgen y las intermitentes Águilas Cibaeñas. Lino dirigirá su tercera final en cuatro temporadas en la liga, todas con equipos diferentes.
El actual capataz de los Toros cayó ante los Leones al dirigir a los Tigres en la serie definitiva de la temporada 2015-16. En 2017-18, condujo a las Águilas al título contra los propios azules y en el pasado invierno no terminó la serie regular con los cibaeños.
“He aprendido de las experiencia anteriores y no es bueno dejar que el equipo pierda el ritmo, aunque se debe manejar la carga del personal más trabajado”, explicó.
En la jornada 18 del round robin, anoche, Lino apeló a su cuerpo de relevo para trabajar el partido completo.
“Los que lanzaron el martes no trabajarán en el juego del miércoles. No he decidido qué relevista iniciará pero serán ellos los que trabajen el juego completo”, recalcó Rivera.
— Abridores
La temible rotación de los Toros es parte del personal que recibe descanso en estos días. Los lanzadores taurinos comandan la semifinal con efectividad colectiva de 2.93, mientras que todos sus rivales están sobre 4.00.
