El proceso puesto en marcha en los primeros días de diciembre pasado por la Junta Central Electoral, para la celebración de las elecciones municipales del 18 de febrero, se acerca a su fin.
Un comunicado del órgano electoral dado a conocer este fin de semana deja ver que, realmente, llegamos al tramo final del proceso.
De acuerdo con el documento, el domingo día 18 de febrero no es laborable.
Además, los candidatos, partidos y organizaciones políticos tienen hasta las 12:00 de la noche del jueves de esta semana, día 15 de febrero, para realizar toda la promoción de la que sean capaces con fines proselitistas. A partir de la hora indicada impera la denominada veda electoral.
Igual ha hecho efectiva la veda para la publicación y difusión por cualquier medio de encuestas o sondeos electorales.
También —y de acuerdo con la JCE— estará prohibida desde las 7:00 de la mañana del sábado, día 17, el expendio o distribución de bebidas alcohólicas hasta las 5:00 de la mañana del lunes, día 19.
Como se puede entender, se trata en un caso de medidas de control sobre el proceso abierto de manera oficial el día 6 de diciembre, y en otro de prevenciones para la garantía de la equidad y un grado apropiado del orden que debe imperar en las horas previas a la consulta y las primeras del conteo.
Es, definitivamente, el tramo final de la campaña electoral, enmarcado entre la apertura oficial y el anuncio de algunas restricciones.
Después de más de dos meses de promoción oficial de candidaturas, lo que resta es apelar al buen sentido de los líderes políticos y de los electores.
Y desde luego, referir aquí algo que debe de saber hasta el más apasionado: El mundo no termina con los resultados favorables o adversos del domingo.
Es, por lo contrario, un día en el que empiezan muchas cosas.
