
SANTO DOMINGO.-Llegó octubre rosa, el mes internacional de sensibilización sobre el cáncer de mama que, con el paso de los años se ha robustecido como una de las campañas globales de mayor impacto en diversos sectores de las sociedades, para crear conciencia sobre la detección temprana, el diagnóstico oportuno y el tratamiento adecuado.
Para arrojar luz sobre la importancia de la prevención temprana, los tipos de cánceres que se desarrollan de diferentes maneras y las alternativas para tratar esta patología, la oncóloga clínica Rosa Batista, explica que el cáncer de mama es una enfermedad multifactorial que depende de la combinación de factores genéticos, hormonales, ambientales, metabólicos y de estilo de vida, sin que uno solo sea la causa principal, advirtiendo que “el cáncer de mama hereditario representa solo entre el 5 % y el 10 % de los casos”.
Al hablar sobre los principales factores de riesgo modificables que pueden incidir en la prevención del cáncer de mama describe que son el sedentarismo, la obesidad o el sobrepeso, el consumo de alcohol, una dieta poco saludable, el tabaquismo, entre otros.

La especialista dijo que los casos de cáncer de mama continúan en aumento a nivel mundial, aunque la incidencia varía entre países con distintos niveles de desarrollo.
Es el tipo de tumor más frecuente diagnosticado en mujeres, por encima del cáncer de pulmón y del colorrectal y que las campañas de detección temprana han contribuido a realizar diagnósticos más oportunos.
Alta tasa de curación
Batista fue categórica al decir que la clave está en que el cáncer de mama detectado en etapas tempranas tiene una alta tasa de curación.
Por ello, la detección oportuna de esta patología permite combatir la enfermedad con mayor eficacia.
La galena sostuvo que “aunque no se cuenta con estudios específicos en nuestro país, a nivel mundial los países menos desarrollados enfrentan mayores dificultades para acceder a tratamientos y presentan menor cultura de realización de pruebas para la detección temprana.
En consecuencia, la mortalidad suele ser más elevada”. Por otro lado, expresó que es fundamental continuar enfatizando la detección temprana y educar a la población sobre el hecho de que cualquier mujer puede llegar a padecer esta enfermedad. Afortunadamente, hoy se cuenta con profesionales y tratamientos médicos adecuados para enfrentarla con éxito.
Tipos de cáncer mama
La oncóloga afirma que algunos cánceres de mama invasivos presentan características especiales o se desarrollan de diferentes maneras, lo que influye en su tratamiento y pronóstico.
- Carcinoma ductal invasivo: Es el tipo más común. Se origina en las células de los conductos que transportan la leche desde la mama hasta el pezón, y posteriormente invade el tejido mamario circundante.
- Carcinoma lobulillar invasivo: Se origina en los lóbulos mamarios, que son las glándulas productoras de leche.
- Cáncer de mama inflamatorio: Tipo poco frecuente en el que las células cancerosas bloquean los vasos linfáticos de la piel de la mama, provocando hinchazón, enrojecimiento y sensación de calor.
• Clasificación molecular:
Según la clasificación molecular, los subtipos de cáncer de mama invasivo se dividen en cuatro categorías principales: - Luminal A: Alta expresión de receptores hormonales (estrógenos y progesterona), baja proliferación celular (Ki-67 bajo) y negatividad para HER2. Es el subtipo con mejor pronóstico y más frecuente en mujeres posmenopáusicas.
- Luminal B: Expresa receptores de estrógenos, pero carece de receptores de progesterona. En algunos casos presenta sobreexpresión de HER2, lo que permite utilizar terapia hormonal y terapia dirigida anti-HER2. Los subtipos luminales (A y B) son los más comunes, representando alrededor del 65 % de los casos.
- HER2 positivo: Se caracteriza por la sobreexpresión de la proteína HER2 y ausencia de receptores hormonales. Representa aproximadamente el 20 % de los casos.
- Triple negativo: No expresa receptores hormonales (estrógenos ni progesterona) ni HER2. Es el subtipo menos frecuente (alrededor del 15 %) y, en general, el de peor pronóstico.
Recomendación casos de antecedente familiar
Los riesgos. La galena, quien es miembro del grupo multidisciplinario Urus, manifestó que cuando existen antecedentes familiares de cáncer de mama, la autoexploración y la exploración clínica deben iniciarse desde los 20 años.
Asimismo, las pruebas de detección como la mamografía y la sonografía deben comenzar a una edad más temprana y realizarse con mayor frecuencia en mujeres con riesgo promedio.
“Sin detección temprana, el cáncer suele diagnosticarse en etapas avanzadas, lo que disminuye las probabilidades de curación y aumenta la mortalidad”, apuntó.
Etiquetas
Erika Rodríguez
Periodista, ganadora del Premio Nacional de Periodismo Turístico Epifanio Lantigua en la categoría Gastronomía y Turismo.