El involucramiento de las comunidades, junto a la información oportuna, son elementos vitales para el diseño y estructuración de las estrategias indispensables en procura de superar exitosamente una crisis como la sanitaria que afecta el mundo.
La letal pandemia del coronavirus Covid 19, que provoca cada día defunciones que se cuentan por millares, representa una de esas crisis que ameritará de medidas bien articuladas de parte de autoridades gubernamentales y del colectivo general, con el objetivo de frenarla a mediano plazo.
Hasta el momento, se conoce de países que han puesto en marcha estrategias que les han permitido alcanzar un relativo éxito, tales como los casos de Corea del Sur, Singapur y Alemania; así como los territorios de Taiwán y Hong Kong.
En el caso de la República Dominicana, los datos ofrecidos este domingo por el Ministerio de Salud Pública, ameritan que se disparen las alarmas, porque los fallecidos por el coronavirus ascienden a 173, con 38 nuevos decesos en 24 horas; y los positivos confirmados suman ya 2,967 casos.
Naturalmente, resultaría mezquino no reconocer el esfuerzo que lleva a cabo la administración que encabeza el presidente Danilo Medina para afrontar la situación, materializado en una serie de medidas adoptadas por la Comisión de Alto Nivel para la Prevención y Control del Coronavirus, que han incluido la asistencia económica a alrededor de 5 millones de personas en condiciones de vulnerabilidad y a cientos de miles de trabajadores afectados por suspensiones de empresas.
Ciertamente que el aislamiento eficaz de los enfermos y evitar que se propague el virus entre un mayor número de personas abre la posibilidad para detectar posibles contagios que todavía no ha desarrollado síntomas.
Esto así, en vista de que una vez se reportan los primeros contagios de un nuevo virus en una población, las medidas de contención dejan de tener sentido y otras, como el distanciamiento social, son más efectivas para evitar que los segmentos poblacionales más vulnerables se contagien.
El hecho de que el país tenga una letalidad superior al 6 por ciento y el número de contagios se multiplique cada día, muestra que la autoridad sanitaria debe modificar las estrategias implementadas.
Resulta imprescindible la puesta en marcha de una movilización nacional que integre a la sociedad en su conjunto, especialmente en aquellas demarcaciones en las que se ha determinado la circulación comunitaria del patógeno.
Sin duda que ya ha llegado el tiempo de la acción basada en criterios estratégicos. Se debe evitar la sobreexposición de la máxima autoridad sanitaria; una vez anunciados los primeros casos, no es necesario que aparezca día a día contando la evolución numérica de enfermos y fallecidos.
Los estrategas deben dosificar su presencia para utilizarla en los momentos críticos o políticamente correctos.
Que se le vea en acción, pero que no se le espere cada día para saber cuántos enfermos o muertos “van ya’’. Los técnicos también pueden dar la información.
Lo que sí se debe es asegurar cada día, y a la misma hora, un boletín noticioso, no solo epidemiológico, que resalte la evolución de la enfermedad, sino, además, que contenga información relevante para las comunidades en que más ha avanzado la infección.
En manos de la autoridad sanitaria está la responsabilidad de frenar la propagación del virus, creando conciencia de qué es el Covid 19, y movilizando a toda la sociedad dominicana.