- Publicidad -

Tecnología contra la corrupción

No cabe duda de que la lucha contra la corrupción tiene en la Dirección de Compras y Contrataciones del Estado (DGCP) una de sus oficinas clave, donde el gobierno ha concentrado ingentes esfuerzos para transparentar los procesos, dotándola de recursos y métodos que buscan evitar los vicios que suelen presentarse en los concursos públicos.

Al utilizar tecnologías digitales para promover la transparencia en los registros de proveedores, se fomenta la integridad. Las redes sociales, al igual que las bases de datos, son nuevas armas poderosas contra la corrupción.

A nivel mundial, los sobornos cuestan USD 2 billones al año, casi el PIB de Italia y una cifra superior a los USD 142,000 millones destinados a la ayuda global para el desarrollo, según Chris Wellisz, economista del Banco Mundial.

“Los funcionarios corruptos desvían fondos públicos a proyectos innecesarios que generan sobornos, agotando los recursos que podrían emplearse en salud, educación y otros servicios para los pobres. Además, la juventud tiene escasos incentivos para aprender en una sociedad en la que importa más a quién se conoce que lo que se sabe”.

Susan Rose-Ackerman, catedrática de Derecho de la Universidad de Yale que estudia la economía política de la corrupción, afirma que “los países menos corruptos tienen mayores tasas de crecimiento y un PIB más alto, así como un mayor nivel en el Índice de Desarrollo Humano de la ONU”, que mide aspectos como la esperanza de vida y los años de escolaridad.

Los gobiernos deben combatir la corrupción mediante mejores sistemas de transparencia, rendición de cuentas y fortalecimiento institucional. Los modernos centros de datos en las oficinas de compras y contrataciones del Estado son necesarios para registrar toda la información sobre las licitaciones. La tecnología de cadena de bloques, que intercambia dinero o información en una base de datos que registra automáticamente las transacciones, se convierte en una pieza clave para un proceso confiable y para la toma de decisiones.

Existen empresas dedicadas a ofrecer servicios de encriptación que almacenan la información en una red de ordenadores y copias de seguridad, de modo que no pueda ser robada ni modificada.

Las plataformas que garantizan la integridad de los procesos, mediante tecnología de cadenas de bloques también llamada “tecnología de registro distribuido”, creada inicialmente para almacenar e intercambiar bitcoines o criptomonedas, han sido adaptadas para muchos otros usos.

La tecnología de cadena de bloques es tan poderosa porque ofrece seguridad: la información digital es fácil de modificar, pero las cadenas de bloques lo hacen prácticamente imposible.

Se puede detectar, por ejemplo, cuando una persona o empresa está recibiendo un número inusual de adjudicaciones. La meta es ahorrar tiempo y dinero, haciendo el bien a la sociedad mediante el uso de tecnología para enfrentar uno de los problemas más graves del mundo.

“Blockchain es un libro de contabilidad digital descentralizado e inmutable que registra transacciones de forma segura y transparente en una red de computadoras. En lugar de una base de datos centralizada, la información se distribuye entre múltiples nodos, y cada nuevo bloque de transacciones se vincula criptográficamente al anterior, formando una cadena. Esto hace que sea prácticamente imposible alterar o falsificar los datos registrados, ya que requeriría modificar todas las copias de la cadena en la red”. I.A.

Es bueno aclarar que la corrupción también se manifiesta después de la adjudicación de un contrato, cuando, por ejemplo, un constructor usa materiales de mala calidad para abaratar costos. La tecnología facilita la recolección de datos y las contrataciones del gobierno necesarias para analizar y buscar indicios de derroche, fraude y corrupción. En otras palabras, permite detectar patrones.

La participación de ciudadanos, como los veedores, para dar seguimiento es fundamental. Recibir denuncias y compartirlas a través de una aplicación creada para esos fines es necesario, así como registrarlas en una base de datos con fechas para mantener récords.

Periodistas y ciudadanos comprometidos, conocidos como guerreros digitales, actúan como testigos para verificar lo que está mal y combatir la falta de transparencia.

Ahora bien, aunque la tecnología digital es efectiva, se requiere un apoyo gubernamental constante en la lucha contra la corrupción. Una institución comprometida y que cumpla su rol es la mejor medicina contra este flagelo que frena el desarrollo.

Etiquetas

Economista y contador público, egresado de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) con maestrías en Administración Pública (PUCMM), Manejo Sostenible del Agua (PUCMM), Contabilidad Tributaria (UASD) y Riesgo de Desastres y Gobernanza del Cambio Climático (Universidad Alfonso X el Sa...

Artículos Relacionados