El Día 
Serbia celebró elecciones el domingo pasado en medio de la pandemia y las mismas se realizaron sin mayores contratiempos sanitarios.
La Junta Central Electoral tiene la obligación de crear las condiciones sanitarias idóneas para que la población dominicana se sienta confiada al acudir a votar sin el temor de contagios del nuevo coronavirus Covid-19.
Las medidas de precaución no sobran.
De igual manera deben adoptarse las medidas logísticas para facilitar la votación en medio de la pandemia.
Por ejemplo, resulta difícil de comprender que en esta circunstancia el horario de votación se haya reducido una hora, en vez de aumentarla para que así la gente pudiera espaciar más su asistencia y evitar el cúmulo de personas.
Se podrá alegar que con una hora menos de votación se adelante en el conteo, pero en las actuales coyunturas lo fundamental es facilitarle el voto a la gente.
De igual manera, se debe buscar una solución por vía administrativa para que los empadronados en el extranjero que permanecen en el territorio nacional puedan votar en las mesas que indica en su cédula. Recordar que desde hace meses los aeropuertos están cerrados y esas personas, aunque quisieran, no podían retornar con facilidad a sus países de residencia.
El entintado en el dedo hay que repensarlo, pues eso evita que la gente pueda usar guantes durante la votación y que además tenga que ponerse en contacto con un artefacto usado por desconocidos.
La Junta ha dicho, con justa razón, que las personas afectadas por Covid-19 tienen derecho a ejercer el voto. Pero también debe anunciar un protocolo especial para estas personas y que no se constituyan en fuente de contagio.
Faltan 12 días para la votación por lo que se debe arreciar una campaña para que la gente conozca los protocolos sanitarios aprobados para el proceso de votación.
Son solo algunos puntos puestos a consideración para que el ciudadano sienta que puede ir a votar sin mayores riesgos de contraer el Covid-19 y reducir así la abstención por temor.
