Santo Domingo.– La Sociedad Dominicana de Pediatría exhortó a los padres a prevenir enfermedades cardiovasculares en infantes debido a las repercusiones que podrían degenerar en la muerte.
Sandra Orsini presidenta de la entidad, entiende que la tecnología en cuestiones de salud avanza de manera exponencial en el país y que los pediatras deben estar atentos al momento de recibir un niño con signos que puedan indicar alguna anomalía cardiópata.
Recomendó a los médicos hacer un diagnostico correcto de las enfermedades producidas por el estreptococo que es la causa que lleva al desarrollo de fiebre reumática.
En el caso de hipertensión y síndrome metabólico, desarrollando una vida saludable, previniendo la obesidad y cultivando el ejercicio físico.
Llamó a los pediatras a pensar en estas condiciones al momento del nacimiento y con ese diagnóstico oportuno hacer un referimiento temprano a instituciones con servicios especializados.
La pediatra habló de esto en el desayuno-panel “Nuevos avances en Cirugía Pediátrica Cardiovascular¨, de la Sociedad Dominicana de Pediatría en coordinación con el CEDIMAT.
La conferencia contó con la ponencia del doctor David L.S. Morales, quien relató la experiencia del Hospital de Niños de Cincinnati, en avances tecnológicos sobre trasplante de corazón, y la utilización de tecnología para prolongar la vida de pacientes con fallos cardiacos.
Morales informó que en el 2016 realizaron 525 trasplantes de corazón en Estados Unidos y 120 de pulmón a nivel mundial, pero que el número de niños con fallas cardiacas es elevado, a pesar de que cada año se prolonga el tiempo de vida para estos pacientes trasplantados.
El especialista reconoce que en el país se está haciendo procedimientos muy complejos y que cuenta tienen la tecnología apropiada según las necesidades.
Comentó que la relación entre el Centro Cardiovascular de CEDIMAT y el Hospital de Cincinnati es directa y saluda que se utiliza en gran medida el CorMatrix, medicina de alta tecnología que permite a los cirujanos restaurar la anatomía natural del tejido cardíaco.
La doctora Orsini asegura que las enfermedades cardiovasculares quirúrgicas congénitas son amplias, dentro de las más frecuentes están las cianógenas como la teralogía de fallot y acianógenas la comunicación intraventicular.
“La función del pediatra es detectar de manera temprana y oportuna estas patologías, debido a que el corazón es un órgano básico y vital para la vida de las personas”, sostuvo.
Orsini entiende que pese a que muchos niños no llegan a recibir a tiempo la atención, puede detectarse la patología que presente en un rango de tiempo que abarca desde el momento del nacimiento hasta las primeras 24 horas, o incluso el primer mes.
Informó que las manifestaciones que apuntan a un problema cardiaco van desde dificultad para respirar y por cianosis por falta de oxígeno a la sangre u al cerebro. El tiempo de intervención del niño es distinto según la patología.
El peso adecuado, determinar si existe otra comorbilidad que por lo regular va acompañada de las complicaciones cardiacas, indicó.
Sostuvo que problemas gastrointestinales, y síndromes genéticos como el Síndrome de Down, son de los factores asociados al tiempo de intervención apropiado para el niño.
El jefe de cirugía cardiovascular pediátrica del Centro Cardiovascular de CEDIMAT, doctor Juan R. León, informó que CEDIMAT tiene una media anual de 250 procedimientos, donde tienen mayor incidencia los casos de la tetralogía de Fallot.
La tetralogía de Fallot es el estrechamiento de la válvula pulmonar y de la arteria pulmonar principal. Esta afección también se llama estenosis pulmonar.