No vamos a ahondar en la idea o planteamiento de que para graduarse de bachiller se ponga como requisito el que el alumno sepa de memoria el himno nacional completo.
Pero sí queremos dejar sentado que no nos parece una aspiración absurda la planteada por el Ministro de Educación.
El Himno Nacional dominicano, además de ser hermoso, cuenta de manera sucinta y poética los episodios más importantes en la conformación de la nación dominicana.
Además, incluye estrofas inspiradoras que terminan convirtiéndose en un ferviente llamado al orgullo patrio.
La literatura del Himno Nacional atraviesa la gesta independentista, la inspiración trinitaria, el traspié de la anexión, la reacción del colono ante el avance restaurador y la gloria de definir de una vez y para siempre la independencia nacional.
A la luz de la discusión surgida por el aspiracional del Ministro de Educación hay que concluir que aunque no se ponga como condición infranqueable el memorizar el Himno Nacional completo, nadie debiera terminar el proceso de formación preuniversitaria sin haberlo analizado y comprendido.
La parte que suele recitarse tiene una marcada referencia a la gesta independentista junto a una alegoría de la libertad.
La parte que suele no recitarse contiene las referencias a la nefasta anexión y luego incluye la noble y heroica gesta de la Restauración, con una parte conclusiva que consiste en exacerbar el amor por la patria unida a la determinación de preservar su independencia.
A lo mejor un primer paso sea incluir como contenido obligatorio en más de un curso el estudiar y analizar el himno nacional, no como un ejercicio de memoria, sino de comprensión.