Amor. Estos días es como un tema recurrente y todo el mundo habla, muestra o comparte sobre eso. Amor. Creo que ha sido declarada como una de las palabras más bonitas del mundo en nuestro idioma. Y hay muchas razones para que tenga este título.

Es algo buscado y deseado por todos. Es una forma de darte cuenta que primero tienes que amarte a ti mismo, incluidas tus imperfecciones. Es lo que se impregna es cada cosa que haces, tu trabajo sale mejor si se acompaña de este vocablo, si cocinas y le pones este ingrediente, te quedará sabroso siempre.

Qué decir si lo traes como protagonista en tus relaciones con todo aquello que te rodea, no tiene que ser una persona, puede ser cualquier cosa. Si lo tratas con amor, todo será diferente.

Sentirlo te hace estar bien. Compartirlo, logra que estés aún mejor. Es la forma de que el vaso siempre esté medio lleno, porque cuando el amor dice presente llegan otros invitados: alegría, esperanza, solidaridad, empatía… Y muchos más.

Por eso creo firmemente en todos los tipos de amor que existen, que al final se reducen a uno con miles de manifestaciones. Y es que no es solo la palabra más bonita, es el sentimiento más profundo y capaz de lograr cualquier cosa.

Ama lo que eres. Lo que haces. Lo que puedes llegar a ser, sin buscar lo perfecto, sí lo real. Pon amor en cada cosa. Compártelo. Deja que sea el sentimiento que dirija tus pasos, te aseguro que siempre arribarás a buen puerto.

No pienses en recibirlo, llegará, sino en cómo lo puedes multiplicar para que no solo sea la palabra más bonita, sino la más multiplicada en cada rincón.

Creo que así el mundo sería un lugar maravilloso para vivir. Ama amar.