Santo Domingo. – El Seguro Nacional de Salud (SeNaSa) lanzó el proyecto Desarrollo Sostenible y Gestión de Residuos Sólidos en Barrio Blanco, San Pedro de Macorís, con el objetivo de reducir la contaminación y mejorar la salud de la comunidad.
Esta acción, que se desprende del programa de Responsabilidad Social Institucional “SeNaSa Verde” busca provocar un impacto medioambiental positivo en la ciudadanía y cuenta con el apoyo del Ayuntamiento Municipal, la junta de vecinos y diversos sectores de la sociedad, con la coordinación del Centro de Innovación Atabey.
Este proyecto se inscribe en las prioridades planteadas en la Estrategia Nacional de Desarrollo, así como en el Plan de Desarrollo Municipal del ayuntamiento, en sinergia con otras iniciativas municipales.
Durante su intervención, el director ejecutivo de SeNaSa, el doctor Santiago Hazim dijo que Barrio Blanco es una de las zonas más afectadas por la contaminación debido a diversos factores, por lo que debemos unirnos todos para enfrentar esta problemática.
Dijo también que está totalmente seguro de que podemos convertirnos en un ejemplo para el resto del país y junto al Gobierno central poder convertirnos en el verdadero cambio.
Por su lado, Raymundo Ortiz, alcalde de San Pedro indicó que ve con agrado esta iniciativa y felicita a SeNaSa que viene a convertirse en un. aliado de este ayuntamiento en el tema del manejo y recogida de los desechos sólidos, a través del reciclaje y otras acciones de concientización.
De igual forma, Domingo Contreras, presidente del Centro de Innovación Atabey expresó que es importante crear una cultura del manejo adecuado de los residuos sólidos para reducirlos significativamente, mediante un proceso de sensibilización, concientización y corresponsabilidad ciudadana.
En República Dominicana existen 358 Vertederos a Cielo Abierto, de los cuales el 66% ocupan terrenos aptos para siembra de alimentos y el 60% están en zonas de alta importancia hidrológica.
Más del 50% de los residuos que se botan en los vertederos se pueden reciclar o aprovechar y tienen un potencial económico inmenso que puede impulsar el empleo y la generación de importantes recursos económicos.
La producción mundial del plástico se ha multiplicado por 20 desde los años 60, llegando a los 322 millones de toneladas en 2015. Y se espera que se duplique en los próximos 20 años. Adicional a esto se estima que cada año terminan en los océanos entre 5 a 13 millones de toneladas de residuos plásticos, suponiendo el 80% de la basura marina y en el 2050 habrá más plástico que peces en los océanos.