Un grupo de senadores demócratas pidió este viernes al Gobierno del presidente estadounidense, Donald Trump, que los inmigrantes detenidos, especialmente los menores de edad, sean tratados forma humanitaria y sin ser criminalizados.
Washington.- Un grupo de senadores demócratas pidió este viernes al Gobierno del presidente estadounidense, Donald Trump, que los inmigrantes detenidos, especialmente los menores de edad, sean tratados forma humanitaria y sin ser criminalizados.
Después de visitar el pasado 19 de julio la estación de la Patrulla Fronteriza y los centros de detención de Donna y Úrsula, en la localidad de McAlen (Texas), los congresistas expresaron su preocupación por “la crisis humanitaria en la frontera sur que las políticas de esta Administración han exacerbado».
En una carta, dirigida al secretario de Seguridad Nacional en funciones, Kevin McAleenan, y al comisionado en funciones de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, en inglés), Mark Morgan, los legisladores aseguraron que los inmigrantes “no deben ser caracterizados como criminales”, cuando solo un pequeño porcentaje de los detenidos tiene algún antecedente criminal.
El grupo de senadores, integrado por Bob Menéndez, Chris Coons, Dick Durbin, Jeffrey Merkley y el líder de la minoría de ese partido en la Cámara Alta, Chuck Schumer, manifestó su preocupación por el agua que reciben los detenidos en el estación de la Patrulla Fronteriza en McAlen y por el hecho de que los migrantes no tienen acceso a llamadas telefónicas.
“Muchas mujeres adultas solteras han estado detenidas por más de un mes y querían llamar a sus familias”, relataron los senadores en la misiva, en la que además advirtieron que los migrantes expresaron repetidamente que tampoco pueden comunicarse con miembros de sus familias mientras permanecen en custodia.
En concreto, relatan el caso que una mujer que estaba detenida en el mismo centro junto a su esposo no tenía forma de comunicarse con él, mientras que otra aseguró desconocer el paradero de un familiar que fue llevado para atención médica y no había retornado.
“Niños inmigrantes continúan informando que no reciben suficiente comida o la reciben tarde en la noche”, señalan los legisladores.
También piden que los niños tengan acceso regularmente a refrigerios, leche y jugos, y solicitaron les informen si a los inmigrantes detenidos se les ha informado cuándo tendrán la oportunidad de tener una ducha y cepillarse los dientes.
De igual forma, expresan su preocupación por las condiciones de salud de los niños, primordialmente con respecto al contagio de enfermedades, y por la situación de reclusión de las mujeres.
La carta, de cinco hojas, los senadores pide respuesta por escrito a sus consultas antes del 1 de agosto y una presentación telefónica no más allá del diez de ese mes.
La situación de los inmigrantes detenidos ha causado revuelo en la opinión pública estadounidense a raíz de informes difundidos por abogados y activistas que visitaron centros de detención, en particular donde permanecen niños recluidos, y alertaron sobre la falta de salubridad y el trato hacia estas personas.