Santo Domingo.-El expresidente Hipólito Mejía afirmó este viernes que sus seguidores no abandonarán el Partido Revolucionario Dominicano (PRD), pero que participarán «como perredeístas» en el gran frente opositor «Convergencia por un mejor país», integrado además por partidos opositores, organizaciones populares, la sociedad civil y ciudadanos independientes.
El exmandatario dijo que no participará en la Convención del PRD convocada por Miguel Vargas Maldonado, porque a su juicio «es una farsa». Exhortó a sus compañeros a emprender «todas las acciones que sean necesarias para rescatar» al partido de sus «secuestradores».
Mejía se dirigió a la nación este viernes desde el Instituto José Francisco Peña Gómez, donde estuvo acompañado de numerosos dirigentes el partido blanco.
A continuación compartimos texto texto de su discurso.
Pueblo Dominicano
Compañeras y compañeros:
Me dirijo al país y a la familia perredeista para expresar nuestra posición sobre la preocupante situación que vive el Partido Revolucionario Dominicano y, por consecuencia nuestra democracia.
En este momento de dificultades por el que atraviesa el Partido Revolucionario Dominicano, reitero mi lealtad al PRD, apegado a los principios morales que le dieron origen y que se sustentan en su lucha por la democracia y la libertad.
Desde nuestra elección como candidato presidencial en la pasada convención del PRD, hemos hecho todos los esfuerzos a fin de que nuestro partido se unifique, fortalezca, continúe haciendo aportes al país, y sea una verdadera opción de poder para las próximas elecciones.
En procura del entendimiento hemos hecho todo lo posible. Nada hemos dejado de hacer. Comisiones y personalidades de diferentes sectores del partido y de la vida nacional, por casi dos años, han hecho todos los esfuerzos para propiciar un acuerdo.
Las iglesias, especialmente en las personas de nuestro Cardenal y de Monseñor Núñez Collado, personalidades del país, como el doctor José Joaquín Puello, representantes del empresariado, de los medios de comunicación, personalidades internacionales y amigos del Partido Revolucionario Dominicano todos han intervenido en la búsqueda de una solución democrática.
La propuesta más reciente a Miguel Vargas en la búsqueda de la unidad, fue la siguiente:
1. La celebración de una convención democrática y transparente organizada de acuerdo con nuestros Estatutos.
2. Que la Comisión Nacional Organizadora de la convención, estuviera conformada y dirigida por compañeras y compañeros que gozaran de la confianza y credibilidad de la militancia y los aspirantes a puestos de dirección del partido.
3. Que el proceso convencional se realizara con un padrón incluyente y consensuado, para lo cual sugerimos tomar como referencia el utilizado en el 2007, ocasión en la cual Miguel Vargas fue elegido candidato presidencial, o el padrón empleado en el año 2009, con el que se le designó presidente del PRD.
La respuesta a nuestras propuestas nunca llegó de manera formal. Sin embargo, Miguel Vargas envió múltiples emisarios quienes, hablando en su nombre, aseguraron que él estaba dispuesto a un entendimiento, siempre y cuando se le garantizara la continuidad en la presidencia del partido y se le otorgara la candidatura presidencial para las elecciones del 2016.
Mi respuesta a esos emisarios siempre fue que, cumpliendo con las condiciones antes enumeradas, estaríamos en disposición de participar en un proceso convencional en que se garantice el derecho democrático de elegir y ser elegido de todos los perredeistas, lo que reitero nueva vez.
Sin embargo, como resultado de la actitud arrogante y anti-democrática de Miguel Vargas, la militancia y dirigencia del PRD se encuentra sumida en un estado de preocupación y confusión. Esa preocupación es especialmente fuerte entre las compañeras y compañeros que aspiran a ser candidatos a senadores, diputados, síndicos y regidores, en las próximas elecciones.
La pregunta que se hacen la familia perredeista y amplios sectores de la sociedad es ¿Qué hacer?
Para responder a esa pregunta, lo primero que hay que decir es que el momento difícil que vive nuestro partido, es el resultado directo del perverso pacto de las corbatas azules, que en violación a los Estatutos del Partido firmó Miguel Vargas con Leonel Fernández.
Ese pacto fue concebido con la intención de sacar al PRD de competencia, inhabilitarlo en su rol de oposición, excluirlo como opción electoral y así perpetuar al PLD en el poder.
En cumplimiento de ese acuerdo, Miguel Vargas conduce hoy deliberadamente al PRD a una convención amañada, unilateral y divisionista, con el interés de apropiarse ilegalmente de las siglas del partido.
El simulacro de convención que ha convocado Miguel Vargas tiene como elemento fundamental, su certeza de que el Tribunal Superior Electoral aceptará como buenos y válidos los resultados de esa convención, aunque se hayan violado los estatutos del partido, las normas electorales y los más elementales principios democráticos.
La última demostración de lo que estamos afirmando es la desafortunada sentencia del Tribunal Superior Electoral, del pasado martes, que convierte un aguinaldo navideño en una reunión de la Comisión Política del PRD.
Esta sentencia, al igual que las veinte anteriores, demuestra una vez más que el Tribunal Superior Electoral es un órgano al servicio de los intereses de Leonel Fernández, el PLD y Miguel Vargas.
Ante esta situación, la cual considero inaceptable, hemos tomado la decisión de NO PARTICIPAR en la farsa convocada por Miguel Vargas y sus cómplices para este mes de febrero.
Hacemos un llamado a la militancia y dirigencia perredeista a NO PARTICIPAR en esa convención amañada, e invito a mis compañeros a emprender todas las acciones que sean necesarias para rescatar al PRD de sus secuestradores.
Igualmente, hemos decidido participar, como perredeístas, en el amplio frente opositor CONVERGENCIA POR UN MEJOR PAIS, integrado por partidos políticos, organizaciones populares, la sociedad civil y ciudadanos independientes, comprometidos con los mejores intereses del pueblo dominicano.
Las alianzas con otras fuerzas políticas y sociales forman parte de la mejor tradición histórica del PRD. Así lo hicimos en las elecciones del año 1962, en ocasión de la gesta de abril del 1965, con el Bloque de la Dignidad Nacional, el Acuerdo de Santiago y el Acuerdo de Santo Domingo.
Por lo tanto, el esfuerzo unitario que significa la Convergencia forma parte, de la mejor tradición histórica del PRD.
Este espacio de concertación permitirá a los perredeistas y al pueblo, encauzar la lucha y las demandas por las reivindicaciones políticas, económicas y sociales, que le apremian.
Una demanda que no espera un día más, es la aprobación de una ley de partidos políticos y del régimen electoral equilibrada, que asegure la transparencia y credibilidad en el resultado de los comicios.
La composición de la Junta Central Electoral es otro asunto al cual necesitamos ponerle especial atención.
Con esa Junta y ese Tribunal Superior Electoral, el país será conducido a un nuevo matadero electoral, por tanto, debemos emprender acciones puntuales para que esa situación sea definitivamente corregida y no haya oportunidad a que se repita.
Los compañeros y compañeras que aspiran a cargos electivos, pueden estar seguros que en la Convergencia, tienen un instrumento idóneo para hacer realidad sus aspiraciones en un ambiente competitivo, transparente y democrático.
Compañeros y compañeras, ¡OIGANLO BIEN, las maniobras de Miguel Vargas y el PLD no prosperarán. El PRD le pertenece a las bases y al pueblo dominicano, y no a un pequeño grupo de traidores.
La verdadera condición de perredeísta se sustenta en el ejercicio de la democracia, la solidaridad y en la lucha por la justicia social y la libertad.
Es precisamente, por nuestra lealtad a esos principios que siempre seremos perredeistas.
Quiero decirlo bien claro: del PRD nadie nos saca.
Tengamos la confianza de que superaremos esta situación transitoria de manera exitosa, sin renunciar a nuestros principios.
Compañeras y compañeros,
Pueblo dominicano,
En este mes de febrero, honremos a nuestros padres de la patria, redoblando los esfuerzos para salvar la democracia y desmontar los intentos de dictadura que nos quiere imponer el PLD.
Honremos al doctor José Francisco Peña Gómez enfrentando con decisión e inteligencia este nuevo desafío.
En este momento de grandes decisiones no hay lugar para la indiferencia ni para las ambigüedades.
Lo que está en juego es la existencia de un partido, escuela de la democracia y guardián de la libertad.
Lo que está en juego es la propia existencia de la democracia en la República Dominicana.
Adelante, ni un paso atrás.
Muchas gracias.