SANTO DOMINGO.- Los secuestros de dominicanos por bandas haitianas se están volviendo frecuentes, en su mayoría de conductores que transportan cargas a ese país, y que han sido interceptados en el trayecto, luego de cruzar la frontera.
Han sido muchos los camioneros que han caído en las garras de las bandas, entre estos Joel Pineda, Wilson Rodríguez y Luis Díaz, secuestrados en noviembre de 2021, por quienes pedían 200 mil dólares para dejarlos regresar.
Pero en los últimos días, cuando el vecino país atraviesa uno de los peores momentos de su crisis, las bandas han ampliado su blanco de secuestro, persiguiendo a objetivos por los que consideran pueden conseguir dinero, que aparenta ser su principal misión.
Sin embargo, en muchos de los casos de secuestros las víctimas han sido liberadas, pero no se conoce mediante cuál método, ya que en ningún estado al que pertenezcan los secuestrados ni familiares, ha dado cuenta de negociaciones con los cabecillas de las pandillas.
En febrero del año pasado los hermanos Michael Enrique y Antonio Gerer Campusano Féliz, dos técnicos que estaban trabajando en una producción cinematográfica en Haití, fueron secuestrados junto a su intérprete haitiano Junior Albert Augusma, un colaborador de la productora de cine Muska Group, que contrató a los dominicanos para una película y quien también fue puesto en libertad.
Los captores pedían 3 millones de dólares a la empresa productora por la liberación de los secuestrados. A finales de mes los jóvenes fueron dejados en libertad, pero no se sabe si se pagó el dinero por su liberación.
Igual ocurrió con el agregado agrícola y comercial de la República Dominicana en Haití, Carlos Guillén Tatis, secuestrado por la banda 400 Mawaso a principio de mayo, por el que los pandilleros solicitaron 500 mil dólares. Este fue dejado en libertad sin que se conozca que se hizo para que lo dejaran, aunque el Gobierno dejó claro la semana pasado que no pagaba por rescate de secuestrados porque no negocia con terroristas.
La afirmación fue de Jatzel Román, viceministro del Ministerio de Relaciones Exteriores (Mirex) para Asuntos Consulares y Migratorios, quien precisó que el Estado dominicano no paga secuestros como tampoco pagan otras naciones.
Los 17 misioneros estadounidenses secuestrados el año pasado, también quedaron libres sin que se sepa si se pagó la recompensa que exigían los secuestradores, que era un millón por cada uno.
El más reciente es del autobús de la empresa Metro que salió del país hacia Puerto Príncipe, que transportaba a 17 personas, 15 misioneros turcos y haitianos, así como el chofer, dominicano y la azafata, haitiana. Estos dos fueron dejados en libertad el sábado, y en el caso del conductor de bus, Martin Decena, estaba en la embajada dominicana Haití, confirmó el embajador Faruk Miguel Castillo.
Este habría sido liberado por malas condiciones de salud.