Senadores y diputados se despiden de un período de cuatro años con un acto público en el que salieron a la luz esfuerzos por demostrar que el Congreso Nacional en estos cuatro años, pero particularmente en el lapso de un año, no ha sido precisamente un pelele movido por los intereses del Gobierno Central o del Presidente de la República.
En un ejercicio de aritmética, el presidente del Senado, Ricardo de los Santos, trató de mostrarlo al señalar que de 45 leyes promulgadas por el Poder Ejecutivo, 38 habían sido iniciativas de legisladores.
Congresistas de la oposición suelen atribuirle a los del Partido Revolucionario Moderno debilidad con el Gobierno.
Más espacio
El Teatro Nacional, no cabe duda, es un lugar más espacioso para una ceremonia de juramentación a la que se piense llevar a más de mil personas y acomodarlas de una manera apropiada.
Las condiciones acústicas deben ser, además, mejores, pero esto no es todo; según los críticos de la decisión, que no dejan de escudriñar porque al tratarse de política, puede haber olgo oculto.