¿Se desglobalizan las economías?

¿Se desglobalizan las economías?

¿Se desglobalizan las economías?

Antonio Ciriaco Cruz

La integración económica mundial ha estado en declive desde la crisis financiera global de 2008-2010, lo que marcó el inicio de una era de «desglobalización».

El seguimiento de la apertura del comercio mundial (la relación entre las importaciones, exportaciones y el PIB mundiales) revela cinco eras distintas de globalización desde 1870.

Los avances en el transporte profundizaron la integración económica internacional antes del estallido de la Primera Guerra Mundial. La Gran Depresión provocó una reversión de la globalización entre 1914 y 1945.

La integración económica se recuperó después de la Segunda Guerra Mundial y continuó aumentando durante la segunda mitad del siglo XX. La adopción de la liberalización económica supuso la eliminación de las barreras comerciales en los grandes mercados emergentes y condujo a niveles sin precedentes de cooperación económica internacional, que alcanzó un máximo en 2008 del 60.1 %.

Desde esta era de máxima globalización, la integración económica ha ido en retroceso, cayendo al 57.2 % en el índice de apertura en 2023. Desde 2008, China y Estados Unidos han optado por erigir barreras comerciales mutuas que han perturbado las cadenas de suministro y han provocado la propagación de barreras comerciales en otros lugares. Bajo el presidente Xi Jinping y el presidente Joe Biden, China y Estados Unidos están buscando una mayor autosuficiencia en sectores tecnológicamente avanzados.

La pandemia y la invasión rusa de Ucrania han añadido un mayor impulso al retroceso de la globalización. La escasez de productos causada por las medidas para contener el Covid-19 y las decisiones de gobiernos y empresas de reducir o romper los vínculos comerciales con Rusia han llevado a las empresas a reconsiderar la organización de su cadena de suministro.

El mundo se desglobaliza, y parece que es el resultado de cambios y recomposiciones en el orden económico mundial, donde la alianza estratégica entre China y Rusia está liderando un bloque económico y político alternativo a los Estados Unidos.
Incluso si la tendencia a la “desglobalización” disminuye, revertir el proceso que ya ha ocasionado resultaría difícil.