SANTO DOMINGO.-Los sectores productivos que estaban cerrados por la crisis sanitarias del COVID-19 inician la reapertura de sus operaciones a partir de hoy, aunque Salud Pública haber declarado ayer Estado Epidémico el terrino nacional.

Mediante la resolución 000018-2020, el Ministerio de Salud Pública dio luz verde a hoteles, restaurantes, clubes y algunas actividades de entretenimiento y deportivas para que abran sus puertas, condicionado al cumplimiento de los protocolos preventivos contra el virus, resaltando el distanciamiento físico.

El vocero de la entidad, Carlos Suero, explicó que los restaurantes podrán recibir clientes hasta las 10:00 de la noche y que a partir de ahí deberán servir para llevar (delivery).

También deberán permanecer cerradas las galleras, las salas de cine, discotecas y teatros.

De igual manera se mantienen suspendidos los eventos multitudinarios de toda índole, incluyendo los deportivos y artísticos, en espacios cerrados, explanadas y arenas deportivas. Las actividades y entrenamientos deportivos que permitan mantener el distanciamiento físico serán permitidos.

De manera particular, se anunció la apertura de los gimnasios, los cuales deberán mantener los protocolos sanitarios.

La educación (primaria, superior, técnico-profesional, de adultos) seguirá permitiéndose solo de manera virtual. Las regulaciones en ese sector será responsabilidad del Ministerio de Educación, el Ministerio de Educación Superior, Ciencia y Tecnología y el Infotep.

Los servicios religiosos y otras actividades industriales, empresariales y comerciales también será permitida, con el distanciamiento físico.

Las fronteras abiertas
Salud. El ministro de Salud Pública, Rafael Sánchez Cárdenas, afirmó ayer que las fronteras aéreas están abiertas para vuelos turísticos, sin embargo, por la situación del COVID-19, muchos extranjeros han cancelado sus viajes, por lo que en los próximos días no se espera una gran cantidad de turistas.

Dijo que como cada país tiene derecho a establecer sus normas, podrá evaluar la prohibición de vuelos de países con una incidencia mayor de la pandemia y que representen una amenaza.