MOSCÚ, RUSIA.-Moscú busca extender el tratado nuclear que tiene vigente con Estados Unidos y no queda tiempo para negociar cambio alguno, afirmó ayer un alto diplomático ruso.
Vladimir Leontyev, quien encabeza el departamento de control de armas en el Ministerio del Exterior de Rusia, dijo en audiencias parlamentarias que es imposible modificar el Nuevo START, o Tratado de Reducción de Armas Estratégicas, que expira en febrero de 2021.
El funcionario ruso dijo que Estados Unidos sigue obstaculizando las ofertas de Moscú para extender el pacto y hace poco se negó a realizar una reunión entre expertos para hablar de los aspectos legales de su posible extensión.
El gobierno del presidente Donald Trump busca que China se una a acuerdos nucleares, pero Rusia considera irreal la idea, dada la negativa de Beijing a negociar reducciones en su arsenal nuclear, que es mucho más pequeño que el ruso.
El Nuevo START, renovado en 2010 por los entonces presidentes Barack Obama y Dmitry Medvedev, permite que cada país tenga máximo 1,550 ojivas nucleares y 700 misiles desplegados, además de bombarderos.
El pacto puede extenderse otros cinco años.
Si expira el tratado, se eliminarían por primera vez en décadas los límites a los arsenales nucleares de estos dos países.
En tanto, la responsable de desarme de Naciones Unidas advirtió ayer que el fantasma de una carrera armamentística nuclear desatada vuelve a amenazar al mundo por primera vez desde la década de 1970, en el cénit de la Guerra Fría entre Estados Unidos y la antigua Unión Soviética.
Izumi Nakamitsu no identificó a ningún país en concreto, pero claramente se refería a Estados Unidos y Rusia, y posiblemente China, cuando dijo al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas que “las relaciones entre estados -especialmente estados con armas nucleares- están fracturadas”.
Relaciones tensas
—1— Vínculo
Las relaciones entre Rusia y Estados Unidos están en su peor momento.
—2— Duración
El pacto de contención nuclear puede extenderse otros cinco años.
—3— Conflictos
Los conflictos regionales con una dimensión nuclear empeoran, sobre todo en Medio Oriente.