Naciones Unidas.-La resolución de la Asamblea General que pide el “cese de hostilidades” en Ucrania y la retirada de las tropas rusas obtuvo ayer un total de 141 votos a favor y 7 en contra, mientras que 32 países se abstuvieron.
La resolución fue finalmente copatrocinada por 75 países, entre ellos todos los de la Unión Europea, Estados Unidos y varios latinoamericanos (Chile, Ecuador, República Dominicana y Uruguay).
Del lado ruso
El resultado sido muy parecido a las votaciones del pasado marzo y octubre, también para poner fin a la guerra en Ucrania, y los países que ayer votaron en contra fueron -como entonces- los aliados más firmes de Rusia en el mundo- Bielorrusia, Corea del Norte, Eritrea, Mali, Nicaragua y Siria.
Las abstenciones
Entre los abstencionistas se encontraron China, India, Sudáfrica, Cuba y una mayoría de países africanos.
Durante los dos días de intervenciones, muchos países lanzaron repetidos llamamientos a la paz de forma genérica y la apertura de negociaciones, pero el Alto Representante de la política exterior europea, Josep Borrell, dijo que esos llamamientos eran fruto de la “ingenuidad”, pues insistió en que “Rusia no ha mandado ni la mínima señal de que quiere la paz”.
Los europeos, que promovieron la resolución junto con Ucrania desde el principio, advirtieron de que la abstención no serviría porque sería inmediatamente anotada por Rusia como una postura a su favor, según dijo el miércoles el ministro español de Exteriores, José Manuel Albares.
La quinta petición
El punto central de la resolución es el quinto, que pide a Rusia “una retirada inmediata, completa e incondicional de todas sus fuerzas militares del territorio ucraniano dentro de sus fronteras reconocidas internacionalmente”, y llama luego a un “cese de hostilidades”.
Aunque también pide apoyar “los esfuerzos diplomáticos para lograr una paz global, justa y duradera en Ucrania”, también subraya la necesidad de que “se rindan cuentas por los crímenes más graves bajo la ley internacional.
Presidente de España
En tanto, el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, llegó ayer en tren a Kiev para reunirse con su homólogo ucraniano, Volodímir Zelenski, y transmitir el apoyo de España a Ucrania, a un día de que se cumpla un año del comienzo de la invasión a gran escala rusa.
“Vuelvo a Kiev un año después del inicio de la guerra”, escribió Sánchez en su cuenta de Twitter.
“Estaremos al lado de Ucrania y de su gente hasta que la paz regrese a Europa”, ha añadido el presidente junto con un vídeo que le muestra bajando del tren y caminando por el andén.
La visita de Sánchez a Ucrania se produjo después de que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y la jefa del Gobierno italiano, Giorgia Meloni, visitaran Kiev el lunes y el martes, respectivamente.
La posición de Rusia
El embajador de Rusia ante la ONU, Vasili Nebenzia, pronunció ayer ante el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas un encendido discurso contra el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, y contra la Unión Europea, en el que censuró todas sus políticas y los acusó, entre otras cosas, de rusofobia y de corromper los valores de la familia tradicional.
“Cuando los historiadores describan los años 2022 y 2023, en el capítulo dedicado a la Unión Europea, las palabras que probablemente usen más sean degradación, impotencia, miopía y rusofobia; en gran parte gracias no solo a los líderes europeos, sino a los burócratas europeos, incluidos nuestro orador de hoy (ayer), el señor Borrell”, dijo Nebenzya en los primeros compases de un discurso de 13 minutos.
En su discurso, Nebenzya también aseguró que la UE está perdiendo autonomía política y “se está convirtiendo en un apéndice” de la OTAN.
Ayuda para Ucrania
— Economía
Los ministros de Economía y Finanzas del G7 aprobaron ayer un paquete de ayuda financiera a Ucrania de 39,000 millones de dólares para 2023, frente a los 19,800 millones del año pasado, para que pueda asumir pagos.