A su juicio, la pandemia se ha convertido en un "desafío" para las autoridades, la sociedad civil e incluso los organismos de protección.
washington.- La República Dominicana fue sacada de la “lista negra” en materia de derechos humanos de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), según el informe anual de 2017 que publicó hoy ese organismo autónomo de la Organización de Estados Americanos (OEA).
La CIDH reconoció en el seguimiento de sus recomendaciones la importancia de las medidas que el Estado ha implementado para dar solución a la grave situación en la que viven miles de personas -en su mayoría de origen haitiano- que no gozan efectivamente de su derecho a una nacionalidad y los efectos que esto tiene en el goce de sus derechos humanos.
La Comisión reconoció además la importancia práctica del procedimiento de restitución de la nacionalidad amparado por nuevas leyes, aunque insiste en que hay “un reto en su implementación pronta y efectiva» por parte de todas las autoridades, lo cual provoca barreras para garantizar que toda persona pueda acceder al goce efectivo de su nacionalidad.
El Capítulo V del informe contiene un seguimiento de recomendaciones formuladas por la CIDH en sus informes de país sobre tres naciones del hemisferio- Colombia, México y la República Dominicana.
Cuba y Venezuela repiten en la «lista negra», donde el año pasado apareció la República Dominicana.
Sin embargo, el 9 de mayo del año pasado el secretario general de la OEA, Luis Almagro admitió que la CIDH cometió una injusticia contra la República Dominicana y prometió que esa situación sería corregida en el menor tiempo posible, lo que no sucedió.
“Ciertamente se ha tratado de una grave injusticia del CIDH colocar a la República Dominicana en el capítulo 4 de la Carta Interamericana”, declaró el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro al ministro de Relaciones Exteriores dominicano, Miguel Vargas, en el marco de una reunión en la sede del organismo en ese entonces.
La reacción del funcionario de la OEA devino luego que el canciller Vargas le había reclamado lo que consideraba una injusticia por parte de la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos (CIDH) de incluir a República Dominicana en una lista negra con otras naciones que han violado los derechos humanos.
Según el organismo apéndice de la OEA, en esa lista aparecían también Venezuela y Cuba.
Sin embargo, la Cancillería reportó que Almagro admitió ante Vargas que la CIDH incurrió en un “gravísimo error”, porque acudió a informes completamente desactualizados para colocar al país en el llamado capítulo IV de la Carta Interamericana referente a las normas de los derechos humanos.
En la reunión, Vargas le planteó al secretario general de la OEA que el presidente Danilo Medina ha sido el mayor defensor de los derechos humanos a favor de los inmigrantes extranjeros en su país, y que “solamente para documentar a esos extranjeros el Gobierno dominicano ha invertido RD$1.6 millones en un Plan de Regularización de Extranjeros”.