SANTO DOMINGO.- Una vez pase la crisis y todo vuelva a la normalidad, “el óxido producto de la larga inactividad que sobrepasa ya los seis meses, a consecuencia de la pandemia por el Covis-19, será uno de los principales enemigos de los atletas dominicanos”, afirmó ayer el conocido dirigente William Ozuna.

“Las naciones desarrolladas han aislado sus atletas olímpicos y siguen preparándose, pero aquí solo nos han dicho que nos quedemos en casa, lo cual es una clara desventaja para nosotros, cuando se reanuden los eventos clasificatorios, porque en deportes el tiempo perdido no se recupera nunca”, enfatizó Ozuna, presidente de la Federación Dominicana de Pesas.

Dijo que la pandemia ha propinado un golpe tipo nocaut al deporte mundial, echando por la borda todo lo que habían programado y planificado tras el logro de un ciclo olímpico exitoso.

“Esta cris no nos permite planificar nada, a corto, mediano ni largo plazo, ya que lo que vivimos es una gran incertidumbre”, agrega Ozuna.

William Ozuna, presidente de la Federación de Pesas local.

“En lo que a pesas se refiere, estamos pujando para lograr entre 4 y 5 plazas para Tokio”, señaló. “Pero ahora con este brusco rompimiento del ciclo, que incluyó la posposición de los Juegos para 2021, las cosas se nos han puesto bastante difíciles, primero por el factor la edad de los atletas (un año más), también por esta obligatoria cuarentena, que no nos permite trabajar como es debido, agregó.

Expresó que la paralización, aunque afecta a todos los atletas del mundo por igual, los que más sufrirán serán los países de pocos recursos, porque no han podido entrenar.

— Selección
Beatriz Pirón, Crismery Santana, Verónica Saladín (femenino) juntas a Zacarías Bonnat y Luis García (varones), forman el quinteto de atletas criollos de halterofilia, que estarán buscando clasificar a los Juegos Olímpicos de Tokio.