El presidente de Renault-Nissan, Carlos Ghosn, anunció ayer en la 66 edición del Salón de Fráncfort que la compañía dejará de suministrar motores para la Fórmula Uno en 2016.
Dijo a la cadena británica BBC que dejará de proporcionar motores a otros equipos de F1 una vez que terminen sus obligaciones contractuales, por lo que dejó entrever que terminará su relación con Red Bull este año.