La información la ofreció el director del Cesac, general Aracenis Castillo de La Cruz, quien advirtió que el Cesac actuará con drasticidad contra quienes sean detectados en esa práctica.
Tanto los oficiales y agentes del Cesac como de la Policía Nacional mantienen una vigilancia nocturna constante en los alrededores de la terminal aérea para dar con las personas que se están dedicando apuntar con rayos láser, los aviones en proceso de aterrizaje en los aeropuertos.
Castillo de La Cruz agregó que el Cesac dispone de la logística necesaria para la realización nocturna de una labor que permita apresar a esas personas que se dedican a esa práctica.
El oficial dijo que es de interés deDanilo Medina y del ministro de Defensa, teniente general Máximo William Muñoz Delgado, garantizar la paz y tranquilidad de los dominicanos y extranjeros que llegan y salen del país utilizando los aeropuertos.
El director del Instituto Dominicano de Aviación Civil (IDAC) Alejandro Herrera fue el primero en denunciar lo que llama “acto de interferencia ilícita” con el uso de punteros de rayos láser sobre las aeronaves en proceso de aterrizaje, que provocó la queja de pilotos y aerolíneas.
Herrera advirtió sobre la amenaza que para la seguridad del transporte aéreo supone el uso indiscriminado de rayos láser, ya que pueden incapacitar visualmente a los pilotos y poner en serio peligro a las aeronaves y los pasajeros.
“Son tantos los riesgos que presentan para la seguridad aérea el uso de rayos láser apuntando las aeronaves, que pudiera calificarse como un acto de terrorismo”, declaró Alejandro Herrera, advirtiendo sobre las consecuencias legales que el uso de estas luminarias genera a sus promotores.
“En 2014, en Estados Unidos se produjeron al menos cuatro mil ataques a aviones con punteros láser”, citó Herrera.
El impacto de apuntar a un avión con rayos láser es que la cabina recibe un golpe de luz que reduce a nula la visibilidad del piloto, dificultando el aterrizaje de la aeronave y poniendo en riesgo la vida de los pasajeros a bordo.
Esta riesgosa práctica está siendo denunciada por la aviación civil internacional y en el caso de Estados Unidos, el Buró Federal de Investigaciones (FBI por sus siglas en inglés) está ofreciendo recompensa por información que pueda llevar al arresto de cualquier persona que dirija un puntero láser a un avión.
Ante la denuncia del IDAC sobre la ocurrencia de “acto de interferencia ilícita” con el uso de punteros de rayos láser sobre las aeronaves de pasajeros, la Policía Nacional apresó a una persona en Santiago de los Caballeros que un tribunal de ese distrito judicial dictó 30 días de prisión preventiva.