Antonio Ciriaco Cruz 
Antonio Ciriaco Cruz
La dinámica de los acontecimientos geopolíticos se ha constituido en un foco de alteración de las políticas publicas económicas.
Los Bancos Centrales, que durante mucho tiempo funcionaban como si todo lo que ocurriese a su alrededor era lo “económico”, han tenido que reforzar sus departamentos, incorporando expertos en diversos temas de las ramas del saber.
Desde la geopolítica, la psicología, la climatología, la sociología, entre otros, se contribuye a entender mejor la ocurrencia de fenómenos que complejizan los procesos económicos.
Un caso que amerita atención es la “geopolítica”, la cual pone el foco en el estudio de los diversos sucesos políticos acaecidos al nivel mundial, así como en los efectos que estos hechos generan en la sociedad.
La rapidez con que ocurren los cambios en la sociedad impone tener una visión holística, más allá de lo económico. La complejidad de los acontecimientos geopolíticos altera los diseños originales de las políticas públicas.
La guerra entre Rusia-Ucrania, el conflicto Israel-Palestina, un posible retorno de Donald Trump a la presidencia de los EE. UU, la alianza no declarada entre China y Rusia, la expansión de la OTAN, en fin, todos estos procesos, fijan expectativas, generan incertidumbre, alteran decisiones económicas y retrasan reformas económicas.
El presidente de la República, Luis Abinader, anunció que durante este segundo mandato se ejecutarán importantes reformas económicas, a saber: la reforma fiscal, reforma constitucional, reforma a la seguridad social, reforma laboral, entre otros. Sin embargo, el mundo discurre y los acontecimientos geopolíticos avanzan.
¿Qué ocurría si el conflicto bélico Rusia-Ucrania se recrudece? ¿Y si triunfara Donald Trump y este colocara un arancel a los productos de China de un 60 %? Menciono estos, pero otros pueden ocurrir y alterar y retrasar planes y decisiones preestablecida y anunciadas.
Es por eso por lo que las “reformas económicas” tienen que aprovechar el “timing” o “momento”. Los sucesos políticos no se detienen, seguirán su curso. Aún algunos de ellos estén en baja intensidad, comenzar temprano las reformas permitirá avanzar, y alcanzar las metas establecidas.
