Algunos padres relataron que se pierden de disfrutar los primeros días de sus hijos por tener que estar en labores.
Santo Domingo .-Sin importar si la mujer da a luz de manera normal o por cesárea, siempre requerirá el apoyo directo de una persona, que en este caso será su esposo.
De ahí, la importancia del Proyecto de Licencia de Paternidad que fue aprobado en la Cámara de Diputados, que insta a otorgar diez días a los padres, es decir, que le sumarian ocho a los dos que el actual Código de Trabajo establece.
De esto ser aprobado en el Senado de la República Dominicana, donde está actualmente, se estaría igual que el Ecuador y Perú quienes otorgan ese tiempo a los padres. En tanto que en Venezuela, Colombia y Paraguay son catorce.
En el país a la mujer se le otorga el períodos de descanso obligatorio pre y posnatal conforme a lo contemplado en el artículo 236 del Código de Trabajo de la República Dominicana.
En tanto que, el papá solo recibe dos días, para el caso de alumbramiento de la esposa o de la compañera debidamente registrada en la empresa.
Este tiempo irrisorio no le permite al progenitor disfrutar de los primeros días del nacimiento y mucho menos colabora a su media naranja.
A manera de ejemplo, una mujer que parió por cesárea en la mañana de hoy requiere un mínimo de dos días para ser dada de alta, siempre y cuando no presente complicaciones. Este es el mismo tiempo que manda la actual ley de trabajo.
En el caso de ser un parto natural, sin ninguna dificultad, la madre y el recién nacido podrán irse a la casa. En ambos casos, tanto la recién parida como el nuevo miembro de la familia quedan a merced de la ayuda directa de su compañero de vida, mientras ella se recupera del proceso posparto.
Ya sé que no todos los hombres tienen ese espíritu colaborativo y que en algunos casos esta ayuda idónea es delegada a la madre, suegra, vecina y hasta una amiga.
Sin embargo, a juicio de Celedonio Jiménez, sociólogo, explica que no todos los hombres tienen el mismo comportamiento, y que “afortunadamente hay cada vez una porción creciente que cambia, que entiende y ve a la mujer como una compañera a la que hay que brindar apoyo, no sólo por la salud de ésta, sino porque apoyarla es una responsabilidad humana ineludible”.
¿Preparados?
Aunque Jiménez apoya que se le otorgue diez días a los padres, se le preguntó si el país está preparado para que el hombre asuma la responsabilidad paterna y respondió: “En apariencia el país no está preparado. La conducta de una gran cantidad de hombres interpela hoy la masculinidad dominicana; pero se trata de un proceso en que a los hombres hay que irlos enseñando a asumir el rol en el recibimiento y responsabilidad frente a los hijos”.
Narra que cumplir ese rol evitaría que su compañera caiga en las acostumbradas depresiones posparto, “el aislamiento del hombre en este tiempo genera mucha inestabilidad emocional en la mujer y grandes disfuncionalidades en la sociedad”.
Potencial
Eladio Jiménez Madé, oficial de Desarrollo Infantil Temprano en Unicef, también está a favor de extender el mayor tiempo posible el período de licencia por paternidad, lo cual contribuiría a un mayor involucramiento de los padres en la crianza y el cuidado de sus hijos e hijas.
“El disfrute de la licencia de paternidad tiene un grandísimo potencial tanto para el desarrollo integral del bebé y el reforzamiento del vínculo padre-hijo o padre-hija, como para el pleno disfrute y ejercicio del hombre como padre y la reincorporación de la madre a la vida pública y profesional”, explica el oficial.
Destaca que la participación del padre es importante desde la preparación psicofísica para el parto, ayudándole a entender mejor este proceso, y así tener un rol más activo, de mayor utilidad y apoyo para con su pareja cuando llegue el momento.
Entre los beneficios que representa para la madre que la pareja esté, Jiménez Madé cita que el acompañamiento continuo reduce de forma leve la duración del trabajo de parto gracias a la calma y tranquilidad que proporciona a la mujer la presencia de su pareja u otro acompañante.
De igual forma, el apoyo mejora la sensación de control y competencia de la madre, el nivel de estrés es menor, se mejora el paso del feto a través de la pelvis y el parto resulta así más sencillo.
Describe que participar en el parto de sus hijos da a los hombres una mayor y más profunda conexión con sus hijos y su pareja, proporcionándoles mayor bienestar y felicidad como padres, lo que contribuye a una dinámica familiar más unida, fuerte y significativa.
Algunos padres consultados por El Día expresaron que dos días no son suficientes para ayudar. Sin embargo, existen algunas empresas que dentro de sus buenas practicas apoyan esto y le conceden a sus empleados los diez días sin haber una ley.
Nueva generación
161 Mil nacimientos.
Ocurrieron en el año 2022, de estos 81, 982 fueron varones y el resto hembras, según datos de la ONE.
Entrevista
José Horacio Rodríguez
¿Cómo surge la idea del proyecto de paternidad?
Tuve el privilegio de crecer en un hogar con un padre presente y responsable, coresponsable junto a mi madre de la formación tanto humana como académica que hicieron de mí el hombre que soy hoy.
Por eso, este fue un compromiso que asumí desde el año 2019 como parte de mi agenda legislativa en procura de fortalecer las familias y garantizar más niveles de igualdad de lograr ser electo diputado por la circunscripción 1 del Distrito Nacional. Y es un compromiso que hemos cumplido.
¿Cómo habrá garantía?
El proyecto está contemplado para padres que convivan con su pareja, de modo que compartan el tiempo, el amor y la gran responsabilidad del cuidado de ese nuevo bebé que llega a completar el hogar. Concomitantemente, es función estatal seguir impulsando valores familiares tendentes a promover la presencia de los padres en sus hogares.
¿De dónde saldrá los fondos? El proyecto prevé que de la Seguridad Social, así como los costos de las licencias por maternidad, también cubra el costo de esta licencia, de modo que esto no tendría una carga adicional para la empresa privada, y podrá ser completamente remunerada sin afectar los ingresos familiares.