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SANTO DOMINGO.-Hace más de quince años surgió un sueño: recibir a los excursionistas que visitaban la loma Quita Espuela.
Rancho Don Lulú comenzó ofreciendo brindis de cacao y bebidas refrescantes, luego sumó un balneario de agua natural y finalmente abrió sus primeras habitaciones, que desde entonces han alojado a miles de familias en buscan hacer turismo rural y descanso.
Este año, el centro ecoturístico celebra un nuevo aniversario “haciendo lo que mejor que sabemos hacer: servir con amor, ofrecer el mejor chocolate y la auténtica comida criolla”, destaca Luis Amarante, administrador del rancho.
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