Santo Domingo.-La animadversión hacia los anfibios es casi generalizada, ya que estos cuando saltan y caen sobre la piel de la gente crean un estímulo extraño, por el choque de su sangre fría con la caliente de los humanos.

A ese susto repentino puede que alguien le sume la rara impresión de sus ojos brotados y colores camuflados, que los hacen confundir en los lugares donde aparecen, provocando que las personas les huyan, además de restarles valor.

Sin embargo, sirven de control biológico por alimentarse de otros individuos existentes en los ecosistemas, y algunos, como la rana toro (Lithobates catesbeianus), son comestibles, lo que significa que surten beneficios a las personas.

Según Delsi de los Santos, bióloga y técnica del Departamento de Vida Silvestre de la Dirección de Biodiversidad, el nombre común de rana toro está asociado al sonido o ronquido que emite similar a los toros: “uuu…uuuu”.

Mecanismo defensa

“El temor hacia las especies está arraigado porque saltan, son de temperatura fría y al estar mojadas cuando caen sobre alguien, se cree que orinan sobre uno, y es que como seres vivos desprenden un líquido que es su mecanismo de defensa que les ayuda a resbalarse hasta poder escapar”, refiere Delsi tras especificar que la rana toro es la más grande del género.

Afirma que en el país hay una especie invasora que se cree fue introducida desde Estados Unidos con fines comestibles o el uso de sus ancas o muslos largos en platos muy codiciados en zonas de hoteles como Bávaro y Punta Cana.

Características

“Son de color jaspeado (verde claro con marrón) similar a los ‘chamacos’ militares que pasan desapercibidos cuando están en guerra y ellas también entre los árboles y hojas secas. Se alimentan de peces, anfibios más pequeños, camaroncitos y neonatos de tortugas de su entorno”, detalló De los Santos.

La rana toro es del orden anura, que significa que no tienen cola; poseen cuatro patas con membranas inter digitales, que les permite mantenerse nadando.

Están asociadas a cuerpos de agua dulce como riachuelos, arroyos y ríos de corrientes lentas o suaves, charcas y cañadas.

En el país, la mayor parte de sus individuos se encuentran en Sánchez Ramírez, Samaná, Nagua, La Vega y la provincia Duarte.

Contenido estomacal

“Tuve una experiencia de trabajar ocho meses en un proyecto de determinación de su contenido estomacal para observar sus gónadas y periodo de reproducción en Nagua, provincia Duarte y detectamos que ponen miles de huevos en forma de un rosario encima de las aguas, dijo de Los Santos.

Exportación

Su exportación está permitida, aunque desde los años 90 las empresas que la enviaban a Miami para aumentar su peso, sacrificarlas y vender las ancas mermaron por completo.