Rafelito Román en foto de archivo en una actividad en el Centro León.
Enseñar lo que sabe es una de las metas desde siempre del merenguero de música típica Rafelito Román.
El maestro desde hace varias décadas tiene su propia escuela de música típica en la ciudad de Santiago- donde reside hace muchos años – en la que ha formado varias generaciones de típicos en los principales instrumentos que caracteriza: “ Los acordeonistas que están ganando ‘cuartos’ se han formado en mi escuela, como David David, el de Banda Real y otros”.
En la Escuela Rafelito Román cursan estudios de güira, acordeón, tambora, saxofón, bajo y otros más que son demandados por más de 25 alumnos, en su mayoría jóvenes.
El niño Diómedes ha estado siendo formado oficialmente por el maestro Rafelito Román en Santiago. Es un niño prodigio que ya a los tres años vivía prácticamente entre acordeones.
Un ícono
Rafelito Román es uno de los iconos de la música típica y como parte de ese género musical, asegura que a este le hace falta más apoyo de la radio dominicana, “es difícil grabar, y que las emisoras suenen los discos mucho más”.
Deben grabar
Como parte de los exponentes de la música de tierra adentro, entiende que es importante grabar producciones y mantenerse actualizado para el público que le sigue; pero por los altos costos de las grabaciones y la poca difunsión en la radio nacional es que tiene hay muy pocas producciones, pese a su dilatada trayectoria musical.
‘’Ahora con el Internet la gente publica las fiestas que tocamos y así se escucha lo nuevo que cantamos, pero a nivel de discos no es tan fácil hacerlo, si no lo suenan en la radio’’, expresó para EL DÍA el merenguero típico
El acordeonista data de las décadas 70 y 80, cuando eran populares discos tipo 45 y cuyo formato sencillo popularizó temas como “Moreno Tejada”, “La innovación del 16’’, “El cuento triste” y “La mujer celosa’’, entre otros más de su amplio repertorio y que son demandados en la actualidad en las fiestas que ameniza en el país con su agrupación.
*Por Fior D’ Aliza Taveras
