Astaná.-El presidente de Rusia, Vladímir Putin, se reunió ayer en Astaná con el líder chino, Xi Jinping, y el de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, para exhibir su sintonía con viejos socios y amigos pese a la guerra con Ucrania y las tensiones con Occidente.
“La interacción ruso-china en los asuntos mundiales es uno de los principales factores estabilizadores en la arena internacional”, afirmó el presidente ruso durante el encuentro con su par chino en los márgenes de la cumbre de la Organización de Cooperación de Shanghái (OCS).
Se trata la segunda reunión entre Putin y Xi en menos de dos meses, tras su encuentro en China a mediados de mayo, el primer viaje al extranjero del líder ruso después de su reelección para un quinto mandato.
Ambos líderes tienen además previsto volver a tener un encuentro personal en octubre próximo durante la cumbre de los líderes de los BRICS en la ciudad rusa de Kazán.
Y es que, según Moscú, hoy día la OCS y el grupo BRICS emergen como pilares del “nuevo orden mundial”, que debe contrarrestar la influencia de Occidente.
Antes de la cita en Astaná, el Kremlin aseguró que Rusia y China cooperan en todos los ámbitos, “incluidos los sensibles». El intercambio comercial entre Moscú y Pekín ha superado los 200.000 millones de dólares, precisó el portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov.
China y la OTAN
En otro orden, China cuestionó los valores de la OTAN si estos se basan en “dibujar líneas ideológicas” y “crear conflictos”, en respuesta a las acusaciones del organismo multilateral de que el país asiático desafía sus intereses y seguridad.
Las declaraciones fueron realizadas por la portavoz del Ministerio de Exteriores de China Mao Ning durante la conferencia de prensa diaria del departamento, en la que la vocera replicó a las acusaciones del secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, quien dijo que China suministra tecnología avanzada a Rusia para producir misiles y drones, contribuyendo así al conflicto en Ucrania.
Mao señaló que si los valores de la OTAN se basan en “crear conflictos, provocar confrontaciones y exacerbar tensiones dibujando líneas basadas en ideología”, entonces “China no puede estar de acuerdo”.
Afirmó que, en cambio, la OTAN es la que “constantemente desafía a China” porque “interfiere en sus asuntos internos, distorsiona y difama sus políticas internas y externas, y reta seriamente sus intereses y seguridad”.
La portavoz de la Cancillería china reiteró el compromiso del gigante asiático con la “promoción de la paz y las conversaciones” para resolver la guerra en Ucrania”, y criticó a la OTAN por no reflexionar sobre las causas profundas del conflicto y no asumir su responsabilidad en la búsqueda de la paz en Europa y el mundo.
La postura de China refleja las crecientes tensiones entre el país asiático y la OTAN, que han aumentado en los últimos años debido a factores como la expansión militar china, su creciente influencia económica y su relación con Rusia.
En este contexto, se acusa a Pekín de no hacer lo suficiente para detener la exportación de tecnología a Moscú que podría acabar siendo utilizada en el campo de batalla en Ucrania.
Otro viaje de Putin
— Visita
El presidente Vladimir Putin contempla entrevistarse a comienzos del año en el marco de una visita a Turquía. El presidente turco animó a Putin a visitar Turquía “lo más pronto posible”, propuesta que aceptó Putin.