Durante un evento caritativo de los Dodgers, el cubano Yasiel Puig, notablemente más esbelto, dijo ayer  que quería «ser titular otra vez, sea aquí o en otra parte».

A menos de un mes del arranque de los entrenamientos primaverales y seis meses después de ser enviado a ligas menores, Puig ha estado entrenando en el Dodger Stadium durante las últimas dos semanas.

Está preparando su nueva figura para evitar las lesiones que lo limitaron y trabajando con los coaches de bateo en busca de recuperar el bate de impacto que en algún momento lo tuvo al borde de ser una superestrella. Puig, de 26 años de edad, tiene trabajo por hacer.

Cuando regresó de ligas menores en septiembre, tuvo que compartir tiempo de juego en las praderas. Ahora hay más alternativas en el roster.