Productores agropecuarios y el síndrome del impostor

Productores agropecuarios y el síndrome del impostor

Productores agropecuarios y el síndrome del impostor

Luis Ramón Rodríguez, MSc

Los expertos en psicología clínica han acuñado el término Síndrome del Impostor para definir la condición en la que una persona cree ser quien en realidad no es y, normalmente, actúa en consecuencia.

Este parece ser el caso de los productores agropecuarios nacionales, quienes a fuerza de que, tanto consumidores como autoridades nos regateen el reconocimiento que merecemos, nos hemos ido encogiendo socialmente hasta el punto de creer que en realidad somos ciudadanos de segunda categoría.

La baja valoración del sector se manifiesta en el monto del presupuesto nacional que se dedica al ministerio que vela por el desarrollo y crecimiento del sector: 15,800 millones de pesos para este año de un presupuesto que por primera vez rebasa la suma de RD$ 1,224,000,000,000.00 (un billón doscientos veinticuatro mil millones de pesos). Tan solo alrededor del 1.8 % del total, del cual 73 % es para nómina y un 20 % para gastos operacionales.

Y encima quieren endilgarnos el rol de ser los responsables de la seguridad alimentaria de la población cuando este es un rol claramente del Estado.

El papel de los gobiernos es diseñar e implementar políticas públicas amigables y estimulantes a la inversión en el sector agropecuario para que los productores tengan la capacidad de producir con eficiencia y rentabilidad.

Pero no, a falta de eso, entonces nos hacen sentir culpables del hambre de la gente.
Cuando alguien en la ciudad piensa que el campo es algo verde que se ve allá lejos; o que la leche viene de la nevera y no mediante el ordeño de la ubre de una vaca; o que cuando reclamamos derechos, los funcionarios nos tildan de plagosos y mendigos; entonces estamos delante de una sociedad que ignora la importancia de los hombres y mujeres del campo y hasta nos hacen sentir vergüenza de nuestros logros.

Pero NO. El campo es donde moramos los héroes silentes de esta Patria.
Para los que ignoran qué es el campo dominicano, es bueno que sepan:
Que somos casi tres (3) millones de personas que vivimos en la ruralidad.
Que somos 242,000 hombres y mujeres dedicados a la noble actividad de producir alimentos.
Que generamos 400 mil empleos, el tercer empleador más grande.
Que producimos alrededor del 80 % de los alimentos que consume la nación y el 100 % de arroz, plátanos, carne de res, carne de pollo y huevos; 75 % de carne de cerdo, 60 % de la leche y 35 % de las habichuelas.
Que somos el 6 % del PIB, equivalente a un aporte a la riqueza de unos RD$312,000 millones.

*Por Luis RamÓn Rodríguez, MSc



El Día

Periódico independiente.