Santo Domingo.-Dirigentes de los partidos Reformista Social Cristiano (PRSC) y Revolucionario Dominicano (PRD) externaron ayer opiniones encontradas sobre la conclusión de la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos que afirma que el fallo del Tribunal Constitucional viola los “derechos fundamentales de los inmigrantes extranjeros nacidos en el país”.

El expresidente Hipólito Mejía dijo que una reunión entre los mandatarios Danilo Medina y Michel Martelly para buscar una solución a los conflictos generados con la sentencia no tiene sentido porque “los arreglos debieron buscarlos antes del fallo del Tribunal”.

Mientras que el secretario general del PRD, Orlando Jorge Mera, indicó que esa organización política no coincide con “quienes practican políticas discriminatorias, xenófobas y que van en contra de dominicanos y dominicanas que nacieron en el territorio nacional”.

Precisó que el partido blanco rechaza la sentencia 168-13 emitida por el Tribunal Constitucional, que despoja de la nacionalidad dominicana a los hijos de extranjeros ilegales nacidos en la República Dominicana entre los años 1929 y 2010, por ser violatoria a la Constitución y a los convenios internacionales, asumidos por el país en el Sistema Interamericano de los Derechos Humanos.

“De igual manera saludamos el informe de la CIDH, luego de su visita al país y exigimos al Gobierno solucionar el drama humano creado por la injusta sentencia, de acuerdo a la normativa internacional vigente”, dijo Jorge Mera.

A favor

Mientras que el senador Amable Aristy manifestó que hay que respetar la sentencia del Tribunal Constitucional y “poner en alto nuestra independencia y soberanía”.

De su lado, el diputado reformista Víctor Bisonó Aza, dijo que el partido colorao está a favor de que se identifique quiénes son los nacionales dominicanos y que los extranjeros que cumplan con las leyes migratorias del país visiten la nación cuando quieran. “Debemos tener una política migratoria clara”, manifestó el dirigente.

Reporte de la Comisión

En su informe, la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos recomienda al país restituir la nacionalidad dominicana a todas las personas que la tenían antes de la aprobación de la Constitución de 2010, tras advertir que la sentencia del Tribunal Constitucional es “discriminatoria”.

La entidad emitió un informe sobre los derechos humanos luego de cinco días de consultas, en cuyo trabajo determinó que los mayores afectados por ese fallo del Tribunal Constitucional serían los dominicanos de descendencia haitiana, que algunos sectores estiman rondarían las 240 mil personas, pero el Gobierno dice que serían 24 mil.