
En martes, ni te cases, ni te embarques, ni de tu casa te apartes.
El dicho popular recomienda no hacer nada arriesgado el martes, por considerarse un día de mala suerte.
Se trata de un famoso refrán del idioma español que tiene su base en la superstición.
Según detalla la página web del Instituto Cervantes, esto se debe a que este día de la semana estaba consagrado a Marte, el dios de la guerra en la mitología latina, por lo que se consideraba un día de mal agüero para emprender algo importante.
También aclara que en la antigüedad tenía la misma connotación para los egipcios y los turcos y que algunos historiadores españoles relacionaban la superstición porque "los martes se produjeron algunas importantes derrotas de los moros a las tropas cristianas".
