SANTO DOMINGO.– La mañana del viernes, los residentes del municipio cabecera de la provincia San Cristóbal se despertaron con las esquinas, los puntos comerciales y las entradas de los sectores más populosos fuertemente militarizados, tras una serie de hechos violentos que, en lo que va de año, han cobrado la vida de tres comerciantes durante asaltos a mano armada.
“Estamos viviendo entre el temor y la zozobra”, dijo al Periódico El Día una residente del sector Madre Vieja Norte, que pidió no ser identificada.
Explicó que la ola de atracos la ha obligado a cambiar su rutina diaria.
“Ya no voy en las noches al gimnasio por miedo a ser atracada. Uno no lleva nada, pero igual te hacen daño. Estos delincuentes andan sin miedo, no le temen ni a la Policía, y el patrullaje es muy mínimo”, expresó.
La joven consideró positiva la inclusión de militares en el patrullaje, aunque espera que la medida no sea temporal, sino permanente.
Respuesta del Gobierno
Ante la creciente inseguridad, el Gobierno dispuso la militarización de la provincia, con patrullajes “por aire y tierra” a cargo del Ejército Nacional y la Policía Nacional, en una operación conjunta de carácter preventivo e indefinido.
La medida se produce luego de la visita del presidente Luis Abinader a San Cristóbal el pasado jueves, con motivo del 181 aniversario de la Constitución.
La decisión fue adoptada tras los reclamos de empresarios, comerciantes y líderes comunitarios, quienes realizaron una vigilia por la paz y la seguridad la semana pasada. Durante esa jornada, la ministra de Interior y Policía visitó la provincia y prometió fortalecer la presencia policial.
Clamor empresarial
El presidente del Consejo Empresarial de San Cristóbal, Vlamirdi Ruiz, había advertido que la delincuencia representa una “amenaza directa al desarrollo económico de la provincia”, e instó a la Policía Nacional a “sincerarse” sobre las debilidades internas que estarían afectando su capacidad de respuesta.
Uno de los hechos que más indignación provocó fue el asesinato del comerciante Alberto Esteban Vázquez Valdez, de 46 años, ultimado dentro de su negocio por delincuentes armados.
En los últimos dos años, siete comerciantes han sido asesinados durante asaltos en la provincia, según cifras de las propias autoridades y gremios empresariales.
Operativo conjunto
El vocero de la Policía Nacional, coronel Diego Pesqueira, explicó que se trata de una “intervención preventiva” orientada a reducir los hechos delictivos y restablecer la tranquilidad en la zona.
“Estamos tomando la prevención como punta de lanza. El presidente escuchó el clamor de los comunitarios, y por eso estamos aquí para llevar paz y armonía a toda la ciudadanía”, señaló Pesqueira.
El operativo, coordinado por la Fuerza de Tarea Conjunta, involucra a más de 2,000 efectivos policiales y militares, incluyendo unidades del Ejército, la Fuerza Aérea y la Armada de la República Dominicana. El despliegue cubre toda la provincia, desde el casco urbano hasta las zonas rurales y costeras, con énfasis en los sectores previamente identificados como vulnerables.
Para el próximo martes está prevista la entrega de equipos y herramientas a la Dirección Regional de la Policía, como parte de una donación del Plan Estratégico Provincial, el Consejo Empresarial y la Cámara de Comercio y Producción de San Cristóbal.
Desde el inicio del operativo, las autoridades han insistido en que su objetivo es restaurar la confianza ciudadana y reforzar la convivencia pacífica en una de las provincias más golpeadas por la delincuencia en los últimos meses.
“La Policía reafirma su compromiso de proteger y servir, trabajando junto a las Fuerzas Armadas y la comunidad para garantizar un clima de paz y confianza”, concluyó el coronel Pesqueira.