SANTO DOMINGO.-La Sociedad Dominicana de Pediatría presentó propuestas de acciones que disminuirían la tasa de muerte infantil en el país. Estas acciones están enfocadas en la mejora de los servicios de salud, cuidados intensivos y orientación hacia la salud sexual y reproductiva.
Rodolfo Soto Ravelo, presidente de la entidad, recordó que más del 80 por ciento de las muertes infantiles son ocurridas en la etapa neonatal, por lo que las acciones deben estar enfocadas a ese rango de edad del primer mes de vida, que es la mortalidad que no ha podido ser reducida en los últimos 20 años.
Precisó que la tasa de mortalidad infantil se encuentra en un 23 muertes por cada mil nacidos vivos, y solo de mortalidad neonatal abarca 21 muertes.
Recomendó el fortalecimiento de las redes de cuidados intensivos neonatales en todo el país, así como el fortalecimiento en la capacitación de los programas de RCP neonatal y Ayudando los Bebes a Respirar (ABR), a todo el personal de salud relacionado con la atención a los recién nacidos.
De igual modo sugirió aumentar el número de camas de Unidades de Cuidados Intensivos Pediátricos a nivel nacional.
Igualmente la implementación obligatoria del curso taller de resucitación cardiopulmonar avanzado a residentes de pediatría y médicos de emergencia, así como todo el personal de salud que esté relacionado con la atención infantil.
Soto Ravelo resaltó la necesidad de implementar de manera efectiva del Tamizaje Neonatal.
Indicó la reorganización y ubicación de los recursos humanos de servicios de salud sexual y reproductiva fortalecidos y capacitados, en las zonas de mayor demanda poblacional, con énfasis en las adolescentes, antes de la concepción, durante y después le embarazo.
Dijo que es de vital importancia la capacitación continua del personal de salud relacionado con la población infantil, así como la creación de Comités de gestión de cambio, y de investigaciones operativas para fortalecer la toma de decisiones vinculadas a la salud infantil.
El pediatra indicó que es necesario fortalecer el apoyo comunitario y que las direcciones provinciales y regionales cumplan su rol, una como rectora y la otra como provisora de los servicios de salud.
Recomendó el fortalecimiento del programa de prevención de la transmisión de VIH y sífilis madre a hijo, del programa de Ampliado de Inmunizaciones (PAI), protegiendo a las gestantes del tétanos y H1N1, así como la cobertura vacunal en menores de 5 anos según el PAI; y que se incluya la vacuna del virus de papiloma humano. Sugiere además velar por el abastecimiento de las vacunas en el país, tanto en los centros públicos como privados.
Aconsejó la implementación de una red de bancos de leche humana pasteurizada, la promoción de la Lactancia Materna, la estrategia hospital amigo, y hacer más sostenible el suministro de la alimentación parenteral y enteral y del surfactante alveolar a los Recién nacidos prematuros en los hospitales nacionales y regionales.
Reactivación del Comité Nacional de Auditoría de la mortalidad materna e infantil, continuar actualizando el marco normativo en lo que se refiere a la salud de la niñez, monitoreando el cumplimiento del reglamento técnico de atención infantil, guías y protocolos de manejo.
Refirió el control de infecciones neonatales, implementando programas de prevención para las infecciones asociadas a la atención sanitaria; así como la creación de laboratorios de microbiología a nivel nacional.
Resaltó la necesidad de suministrar a los centro de salud de equipos, infraestructura e insumos básicos para la atención neonatal para lograr un parto limpio y cuidados obstétricos seguros, teniendo además disponibilidad de sangre segura.
Dijo que es impostergable fomentar las redes de Atención primaria y Unidades de seguimiento de niños sanos, así como velar por una atención integral de nuestros niños durante la primera infancia; que incluya vigilancia nutricional, estimulación temprana y seguimiento de su crecimiento y desarrollo, ya que sabemos que las acciones tomadas en esta etapa de sus vidas impactaran de manera importante en su sano desarrollo físico y mental.
Estamos convencidos que si éstas y otras medidas establecidas son fomentadas de manera efectiva, este año de la Atención Integral a la Primera Infancia culminará siendo el año de la reducción sostenida de la Mortalidad Infantil en nuestro país.
Recomendaciones de Semana Santa
Llamó a los padres a respetar las normas de manejo seguro, cumplir cabalmente las señales de tránsito, límites de velocidad, no consumir alcohol ni usar los celulares mientras conduce.
Insistió en el uso obligatorio de los cinturones de seguridad, llevar los niños en su silla de carro, no en las piernas de un adulto, ni en el asiento delantero, ni en el centro en la parte trasera. Si en el trayecto se va a detener a comprar algo, no dejar los niños solos dentro del vehículo, ni dejar el vehículo encendido. No dejar los menores solos en los hogares sin supervisión de un adulto.
Dentro del botiquín de viaje debe tenerse analgésicos, antipiréticos, antiinflamatorios, antihistamínicos, sales de rehidratación oral, nebulizadores si sus hijos lo necesitan, vendas compresivas. Igualmente llevar a la mano los teléfonos de emergencia de su pediatra, y localizar un centro de salud cercano en caso de una emergencia. Tener documentación del tipo sanguíneo de cada uno de los miembros de la familia.
Es recomendable no exponerse al sol en las horas pico de 12:00 a 3:00 p.m. y los menores de 6 meses no deben exponerse al sol, ya que les puede provocar quemaduras de primer grado. Recomendó usar protectores solares antes de exponerse al sol y retoque cada 2 horas para mantener su efectividad.
Aconsejó usar ropa fresca acorde a la temperatura, ingerir líquidos hidratantes de manera frecuente para evitar la deshidratación, y evitar el consumo de alcohol y bebidas energizantes.
Tomar precaución en el consumo de alimentos y su higiene al manipularlos para evitar intoxicaciones alimentarias, y si se va a consumir alimentos enlatados, verificar fecha de vencimiento y lavar la tapa antes de su consumo.
Respetar las prohibiciones establecidas por las autoridades sobre los balnearios, ríos y playas clausurados por no ser seguros, así como los horarios de su uso. No dejar los menores dentro del agua solos, por más seguro que les parezca el lugar. Usar siempre los chalecos flotadores y salvavidas.