SANTO DOMINGO.-La periodista Altagracia Ortiz Gómez, del periódico Hoy, denunció que ella y su esposo, el médico Carlos Féliz Cuello, fueron víctimas de un atropello policial por parte de una patrulla que incluso le hizo un disparo a uno de los neumáticos de su vehículo.
La comunicadora dijo que el hecho se produjo el pasado domingo cuando ella y su esposo se dirigían a su casa por la avenida Anacaona. Dijo que tras una discusión con los agentes, fueron perseguidos y luego rodeados por más de 30 policías y tratados como si fueran delincuentes.
Explicó que a pesar de que ella y su esposo se detuvieron a la orden de pare, y entregaron los documentos que les requerían, los agentes desde el primer momento se comportaron de manera agresiva, haciendo caso omiso a la intervención de un coronel que intercedió por ellos.
Aquí la narración del incidente:
«A las 8.35 de la noche del domingo 25 de noviembre, cuando transitaba en dirección Este a Oeste, conducía, mi esposo el señor Carlos Féliz Cuello, médico, recibimos luces intermitentes por parte de una patrulla mixta de la Policía y el Ejército, en efecto, nos detuvimos antes de llegar al restaurante El Lago, ahí nos pidieron papeles, Féliz entregó licencia y cédula, pero insistían en que les entregaran seguro y matricula, además de querer revisar el vehículo, porque estaba tintado.
«Su actitud era beligerante. Decidimos y así se lo comunicamos, que iríamos a un destacamento y así lo hicimos, cuando nos dirigíamos al destacamento de la Cayetanos Germosén, vía la avenida Luperón, éramos perseguidos por la patrulla, en el semáforo de la Luperón, esquina Avenida de la Salud, nos detuvimos porque el semáforo estaba en rojo, la camioneta policial se pasó delante y dijo a los demás conductores que se detuvieran que estábamos huyendo, un raso apelido Cruz Acosta disparó del lado del conductor hacia la goma, cuando el semáforo cambio en verde, seguimos hacia el destacamento de la Cayetano Germosén, pero la goma estaba averiada y tuvimos que permanecer por casi dos horas y media frente al puesto de Chicharrones.
Mientras estuvimos ahí, llegaron y nos rodearon cerca de 30 policías armados con armas largas y cortas, Varias unidades policiales rodearon el lugar.
La patrulla mixta era dirigida por el segundo teniente Abreu Freddy, esa patrulla hace sus labores en el trayecto de la casa del presidente Medina
La patrulla estuvo una actitud de permanente beligerancia y actitud prepotente, parecía como si fuéramos delincuentes. Nos comunicamos con un coronel amigo, quien les habló, pero sus integrantes hicieron caso omiso. Luego de muchas intervenciones, logramos llegar a nuestra casa, tras la intervención y mediación de un mayor de la Policía.
El raso de la Policía Cruz Acosta incluso dejó la licencia de mi esposo tirada, fue un evidente abuso policial.»