La incautación en Puerto Rico de un cargamento de 531 kilos de cocaína en una embarcación deja ver una actividad muy alta en el tráfico de drogas en la región, particularmente en el país, porque los golpes y los anuncios de requisiciones no paran de semana en semana, sumado a los riesgos que implica hoy día el traslado de Sudamérica a cualquiera de los puntos de reembarque.
La embarcación había llegado a Puerto Rico el pasado día 11.
En 36 horas
Treinta y seis horas es menos dos días, tiempo en el que han sido requisados 171 y 806 paquetes de cocaína en las costas de Pedernales, todo ello mientras tiene lugar la Operación Lanza del Sur, que no es un juego de muchachos.
Antes habían sido capturados más de 400 paquetes en la misma región y la pregunta debe ser si se trata de la estrategia de dividir un cargamento o de operaciones distintas.
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