Los maestros han decidido irse de las palabras a los hechos.
Resulta que desde la semana pasada han optado por paralizar la docencia en repudio del concurso para elegir a los directores distritales y regionales, método que el Ministerio de Educación y otros sectores de la sociedad consideran viables y transparentes.
Es decir, que pocos se explican las razones de los profesores para oponerse a un recurso que explora descubrir las habilidades de candidatos.