SANTO DOMINGO.-Plantar un árbol es un compromiso en que se debe involucrar cada ciudadano. Sin embargo, la tarea de “reforestar”, que significa repoblar de árboles las áreas forestales devastadas por cualquier circunstancia, implica un comportamiento apegado a las buenas costumbres.

Entre los requisitos que deben cumplir las brigadas fijas que trabajan en esta tarea figuran el mantener una conducta ética o no incurrir en actos delictivos como matar, robar o involucrarse en corte y quema de árboles y otras acciones que afecten el medio ambiente.

Igual, no ejercer violencia de género o golpear a sus parejas, además debe respetar las instrucciones del capataz o encargado del grupo y el horario establecido para las jornadas que se realicen.

Otra regla para ser incluido en los grupos de trabajo es estar alfabetizados, de lo contrario debe entrar a formar parte del Programa Quisqueya Aprende Contigo, para que puedan manejar las informaciones que amerita el plan, entre otras acciones.

Celebración

A propósito de la conmemoración de “Octubre, mes de la re forestación”, en el que el Ministerio de Medio Ambiente se propone hincar un millón 400 mil plántulas de pino Caribe, caoba criolla y hondureña, cedro y otras especies, Pedro Taveras, coordinador social de la Dirección de Foresta, resaltó parte de las ventajas de esta dinámica.

Beneficios

En la parte bioquímica, los planes de reforestación protegen el ciclo del agua, es decir que los bosques en las cuencas altas sean espacios de retención para que lentamente esa agua llegue a las micro cuencas y la evaporación sea mínima, como también que las corrientes de agua arrastren menos suelos, explicó Tavares.

Árboles crean suelos

Destacó que los árboles crean suelos a través de su descomposición, al tiempo que sirven de retención o sumidero del carbono o CO2 que provocan los gases de efecto invernadero, generando así una atmósfera más limpia, y contribuyen a la protección de la biodiversidad, que es vida.

“Los grandes beneficios que se obtienen con la reforestación en el país es que da lugar en las cuencas hidrográficas de toda la geografía a generar ingresos para las familias más pobres, que según el mapa de la pobreza se encuentran en zonas altas y son causantes de la deforestación, y al integrarse en las brigadas pueden revertir los daños”, dijo Taveras.

Puntualizó que existen alrededor de 600 brigadas compuestas por diez personas, una por familias para que el reparto de empleo sea equitativo en parajes o localidades pobres donde se articulan las jornadas vía las Oficinas Provinciales.

Resultados

—1—Compensación.
Propietarios de parcelas que las ponen a disposición para plantar reciben un pago por servicios ambientales.

—2—Compromiso.
Los miembros de las brigadas reciben un salario mínimo, superior al nivel establecido por el Banco Central, deben ser defensores de los recursos naturales.
—3—Conectividad.
Los bosques de galerías que se forman son relacionados con el sistema de áreas protegidas, que ocupan un 27 por ciento del territorio.