SANTO DOMINGO.-El puerto de Shanghái, el más grande del mundo durante los últimos diez años, sufre un importante colapso que amenaza con provocar nuevas rupturas en las cadenas de suministros durante este año.
Este es un nuevo ingrediente que se suma a la crisis geopolítica entre Rusia y Ucrania, caracterizada por altos costos de las materias primas importadas con incidencia en el mercado local.
A través de este puerto salen diversos productos terminados y materia primas para la producción nacional, entre ellos dispositivos electrónicos y textiles, lo que podría generar una escasez temporal.
En ese sentido, Teddy Heinsen, de la Asociación de Navieros de la República Dominicana (ANRD), expresó que siendo China un factor tan importante para el comercio mundial, la crisis en el puerto de Shanghái supone una disrupción para la cadena de suministro y logística a nivel global.
Esta situación puede, naturalmente, causar retrasos en entrega de mercancías, disminución de contenedores disponibles, entre otros.
No obstante, esto representa también una oportunidad importante para la República Dominicana a través de la figura del nearshoring. “El ‘nearshoring’ es una actividad estratégica en este contexto, pues nuestro país comparte con Estados Unidos usos horarios similares y la cercanía geográfica, permitiendo así que los clientes viajen y tengan reuniones cara a cara con sus proveedores”, destaca el gremio.
Reducir impacto
Explican que para mitigar ese impacto de cara a la compra de insumos, existen lecciones aprendidas que desde la misma Asociación han hecho portavoz y es buscar fuentes alternas de abastecimiento de mercados más cercanos, diversificar.
“Los desafíos serán parte de esta nueva normalidad que nos ha traído el Covid y que debemos enfrentar con una perspectiva de innovación, resiliencia y eficiencia”, manifestó Heinsen a EL DÍA.
Resaltó que durante el 2019 y 2020 el sector naviero invertió más de US$300 millones para aumentar capacidad, mejorar infraestructura, realizar dragados adicionales para continuar eficientizando sus procesos y brindar ese servicio.
Apuntó que de cara al futuro el sector continuará trabajando arduamente, como lo ha venido haciendo, para mitigar potenciales impactos y seguir manteniendo la economía a flote.
Se recuerda que el pasado año, en la reapertura de la economía, el costo del transporte marítimo se elevó en más de un 50 %. Esta vez la imposición de nuevas restricciones en China a causa del Covid-19 supone una puntilla más para el sector de la logística y el transporte.
Empresarios garantizan suministro de alimento
Abastecimiento. La experiencia de la crisis del Covid enseñó a los comerciantes dominicanos a prevenir cualquier crisis en el sistema de suministro y evitar desabastecimiento.
Así lo explicó Mario Lama Haché, presidente de la Organización Nacional de Empresas Comerciales (ONEC) al indicar que han buscado mercados alternativos en países de Suramérica.
“El proceso de inventario de las empresas ha cambiado para evitar alguna crisis en el suministro”, apuntó el empresario al precisar que esa fue la clave para evitar desabastecimiento durante la pandemia.