Niños palestinos reciben alimentos en la Franja de Gaza. Varios organismos han denunciado que Israel está usando el hambre como arma de guerra contra los palestinos en Gaza desde los ataques de Hamas el 7 de octubre pasado.
Ciudad del Vaticano.- El papa Francisco instó este domingo a que se permita el acceso de ayuda humanitaria a Gaza, algo que “nadie puede impedir”, y apeló a la comunidad internacional a tomar pasos urgentes para ayudar a la población de la Franja.
“Aliento a la comunidad internacional a actuar urgentemente por todos los medios para ayudar a la población de Gaza, devastada por la guerra”, dijo Francisco durante sus palabras en el rezo del ángelus en la plaza San Pedro.
“La ayuda humanitaria debe poder llegar a quienes la necesitan y nadie puede impedirlo”, agregó el pontífice, después de ocho meses de escasez de comida, agua, medicinas o suministros básicos que afectan al enclave palestino por las restricciones de acceso israelíes.
A su vez, el papa reiteró su apoyo “a las negociaciones en curso entre las partes” para alcanzar un alto el fuego en la guerra entre Israel y Hamás que dura ya desde hace ocho meses.
“Espero que las propuestas de paz para un alto el fuego en todos los frentes y para la liberación de los rehenes sean aceptadas inmediatamente por el bien de los palestinos y los israelíes”, dijo. Francisco mencionó que el martes “se celebrará en Jordania una conferencia internacional sobre la situación humanitaria de Gaza”, y agradeció a Jordania, Egipto y la ONU que tomaran esta iniciativa.
Por otro lado, el pontífice hizo referencia al encuentro en la Santa Sede que se produjo hace una década -y del que esta semana se cumplió el décimo aniversario- entre el entonces presidente israelí, el difunto Shimon Peres, y el aún presidente palestino, Mahmud Abás.
Según el papa, esta reunión evidenció que “es posible estrechar la mano y que para hacer la paz se necesita coraje, mucho más coraje que para hacer la guerra».
Francisco también instó a “no olvidar el martirizado pueblo ucraniano, que cuánto más sufre, más anhela la paz”, e hizo también referencia a la situación de Myanmar.