SANTO DOMINGO.-Un día tranquilo y de poco movimiento era lo que se percibía ayer en las calles de distintos sectores de Santo Domingo y el Distrito Nacional, pese a que se festejaba el Día del Padre.

Muchos celebraban su día tomando alcohol y jugando dominó en las aceras, como fue el caso de Leonardo Gemán, quien disfrutaba su día compartiendo con algunas de sus amistades.

Germán, quien es vendedor de puertas y ventanas, expresó a EL DÍA que ya la tradición de celebrar a los padres se está perdiendo, pues en la actualidad los jóvenes solo viven en sus teléfonos y la tecnología.

“Yo tuve que llamar a mis hijos que viven fuera del país y decirles felicidades, para que pudieran felicitarme a mí”, expresó.

Cementerio

El Día de los Padres no es de festejo para aquellos quienes han perdido a sus progenitores, por lo que acuden a los camposantos a rendirles honor frente en sus tumbas, llevándoles flores.

La familia Ortiz Rodríguez fue una de las que recordó con nostalgia a su padre en el cementerio de la Máximo Gómez.